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El Mallorca se expone a sanciones por el apagón

Una caída de tensión en los centros generadores de energía eléctrica de la capital balear provocó el doble apagón en el estadio Luis Sitjar que obligó a interrumpir y a prolongar durante casi tres horas el partido Mallorca-Real Madrid. El incidente ha tenido repercusiones inmediatas y la comisión antiviolencia puede acordar sanciones al recinto mallorquinista. Asimismo, peligra la organización del encuentro internacional España-Rumania que se disputará el 19 de. noviembre. Las autoridades de la isla han admitido su bochorno por la imagen que dio un campo obsoleto, inaugurado hace medio siglo.'La fuerte tormenta acompañada de rayos, truenos, lluvia y granizo dejó a oscuras el Luis Sitjar con 24.000 personas en sus gradas. Los servicios de megafonía del estadio solicitaron a los espectadores que no se movieran de sus localidades para evitar males mayores. Si el público hubiese decidido abandonar en ese momento el campo habría colapsado las puertas de salida, con consecuencias imprevisibles.

"Al ver el campo a oscuras los servicios de seguridad del Luis Sitjar actuaron de inmediato para intentar proteger al público y a los futbolistas", explicó.

La directiva del Mallorca también deploró las "penosas condiciones" en que se disputó el partido pero desvió cualquier responsabilidad de los hechos: "El campo es muy antiguo y todos sabemos que no reúne las condiciones, pero hay que recordar que pese a todo no se registró ningún incidente grave", dijo un portavoz.

El sistema electrógeno del Luis Sitjar fue instalado hace 20 años. Se trata de energía halógena, es decir, se desconecta de inmediato ante una caída o subida imprevista de la tensión eléctrica. El recinto deportivo isleño acusa el paso del tiempo y sólo resiste su estructura reforzada hace 10 años.

La directiva balear ha intentado lavar la cara al recinto con reformas puntuales, pero todos admiten que no reúne las condiciones mínimas exigidas para disputar partidos de Primera División.

La Federación Española de Fútbol concedió a Palma la organización del partido amistoso entre las selecciones absolutas de España y Rumania pero el incidente del pasado lunes puede hacer variar la opinión de los directivos y cambiar el escenario.

Es probable, no obstante, que ésta sea la última temporada que el Mallorca reciba a sus rivales en el Luis Sitjar ya que en 1998 está prevista la inauguración del Estadio Olímpico de Son Moix que el Ayuntamiento de Palma construye para los Juegos Universitarios de 1999.

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