_
_
_
_

Un voluntario de Cruz Roja evita posibles víctimas en un atentado de ETA en Granada

"Me confundieron con un loco o con un borracho. Empecé a llamar a los pisos para que la gente saliera a la calle". Así explica José Antonio Sola, de 22 años, voluntario de Cruz Roja, cómo impidió en la madrugada de ayer una posible matanza de ETA en Granada. José Antonio descubrió que el coche de su novia tenía una luna rota y decidió investigar. Así descubrió un vehículo con lanzagranadas y 10 kilos de amosal preparado para un atentado. José Antonio detuvo el tráfico, avisó a los vecinos y, aunque los terroristas hicieron estallar el coche para no dejar huellas, no hubo víctimas; sólo él y un policía resultaron heridos leves.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_