La programación infantil de Canal + cambia de horario y se refuerza con dos nuevas series

El espacio infantil y juvenil de Canal + Programa más o menos multiplicado o dividido (P + o - x o ) se renueva. Al cambio de horario y a los nuevos modelos que vestirán Poliéster y Plexiglás se suman diez coreografías, nueva sintonía y el estreno de las series Blake y Mortimer y El mundo de Bailey Kipper. La sección estrella Basura no es un programa basura inicia el otoño con otra colección de videoclips originales, firmados por Joan Brossa, Carmen Calvo, Eduardo Arroyo o Peter Greenaway.Poliéster y Plexiglás estrenan vestuario diseñado por el pintor catalán Joan Cruspinera. "Los nuevos trajes son el resultado de los guiños pictóricos y minimalistas que este artista ha creado a partir de los garabatos, rayas, trazos, manchas y signos que configuran P + o - x o -.

Con esta vestimenta, realizada en blanco y negro con copias en color, se efectúan extraordinarios juegos de camuflaje con los que pueden llegar a pasar casi, casi inadvertidos, explica Mikel Obiols, responsable del programa infantil de Canal +, galardonado con un Premio Ondas. Otro de los cambios afecta al horario. De lunes a viernes, la cita con P + o - x o - será doble: por las mañanas, de 8.00 a 9.30 y de 13.00 a 13.30. Los sábados y domingos se emitirá de 8.00 a 10.00.

La sección Basura no es un programa basura llegará con otra serie de videoclips originales de minuto y medio firmados por pintores, músicos, fotógrafos, dibujantes o directores de cine. Otro de los alicientes será la emisión de dos nueva series. De lunes a jueves (13.00) le tocará el turno a Blake y Mortimer, una adaptación televisiva de los célebres cómics del dibujante belga Edgar P. Jacobs. Sus intrigas policiacas han apasionado a millones de lectores de todo el mundo y ahora, como personajes de animación, a millones de telespectadores.

El próximo día 19 (13.00) aterrizará en Canal + El mundo de Bailey Kipper, una producción norteamericana que llega bendecida por el éxito. Todos los viernes, niños y adolescentes podrán disfrutar con los experimentos audiovisuales de Bailey Kipper, un chico de once años con mucha imaginación y algo que ningún otro compañero de colegio tiene: un estudio de vídeo profesional y un buen número de microcámaras que le permiten analizar la vida de su barrio, de su colegio, de su casa e incluso de su perro desde una perspectiva irónica y rebelde.