Los futbolistas exigen al CSD que tome medidas

"La patata caliente la tiene el CSI). A él le toca decidir". La AFE y la federación decidieron ayer, tras reunirse con la Liga de Fútbol Profesional, pedir a la Administración que tome medidas para reducir lo que consideran "inaceptable invasión de extranjeros" en el fútbol español. No hubo ultimátum, ni plazo para que la Administración retoque la ley. "Pero debe hacerlo lo antes posible porque esto sí que es de interés general".Después,de tres horas y media de reunión, Pedro Tomás, secretario general de la Liga, apareció ante los medios de comunicación para decir que apenas había nada que decir, "pues la postura de los clubes sigue siendo la misma."El convenio que firmamos en septiembre tiene una vigencia de cuatro años. Hasta el 2000 no hay nada que cambiar. Es cierto que es una ley analizable, pero no revisable. Los resultados avalan esa postura".

La Liga se muestra dispuesta a continuar las conversaciones, "con quien haga falta", pero sin cambiar una sola coma del convenio, "por lo menos, en lo referente a la Primera división". Distinto es el caso de la Segunda. Ahí sí caben novedades. "Es algo que compete a los clubes de Segunda" señaló Tomás, "pero personalmente creo que podría haber una reducción de extranjeros en esa categoría a partir de la temporada 98-99. Es una tontería mantener el número actual cuando la mayoría de los equipos no los utilizan".

Gerargo González Movilla, presidente de la AFE, y Gerardo González Otero, secretario general de la federación, se esmeraron por desmontar los argumentos esgrimidos por el representante de la patronal futbolística. " En España han jugado esta temporada 200 extranjeros" dijo Movilla, y en Italia, por poner un ejemplo, han sido 53. Los futbolistas estamos agotando las vías de diálogo. Sólo resta que la administración haga algo. Y eso pedimos. El responsable a partir de ahora es el CSD".

Preguntado si existía alguna posibilidad de que la AFE utilizara todas las medidas de presión, huelga incluida, Movilla optó por la cautela. "El presidente de los futbolistas nunca ha hablado de huelga. Cuando el CSI) haga pública su postura convocaremos una asamblea y en ella se decidirá lo que más convenga". La federación, que en septiembre firmó el discutido convenio, asegura apoyar a los futbolistas en todas sus peticiones. "Cuando se firmó el convenio hablamos de revisarlo en marzo. Pero decidimos esperar a que acabara la competición. A veces a uno le llega la responsabilidad de decidir. Incluso al CSI). Se han reunido tres partes y falta la cuarta. Hemos agotado la capacidad de diálogo sobre algo que sí es de interés general. A la federación le sigue costando pensar que un señor de Francia es igual que uno de Cuenca".