La Juventus busca la confirmación total

Dortmund es una ciudad alemana y la final de la Liga de Campeones se juega en una ciudad alemana, Múnich (20.30, TVE 1), pero ahí se acaban las ventajas del Borussia en el partido más importante del año. Múnich se prepara para coronar a la Juventus de Turín como el mejor equipo del mundo. Todo ello sería un puro formalismo: nadie duda que el club de Turín ha alcanzado ya ese reconocimiento en el año de su centenario.El equipo de Marcello Lippi ha ganado ya esta temporada, después de la Copa de Europa del 96, la Copa Intercontinental, la Súpercopa europea y, la semana pasada, su segundo scudetto consecutivo. Sólo le falta para redondear un currículo que ningún club italiano, ni siquiera el gran Milan, ha podido presentar hasta ahora en una sola temporada la joya de la corona, la Copa de Europa.

La victoria sería, además, un acto de justicia histórica hacia Marcello Lippi, el técnico que no dudó en desmantelar el año pasado el equipo que había hecho a la Juventus ganar la Copa de Europa -en los penaltis, ante el Ajax- por primera vez en 11 años. Lippi no puso freno a la emigración inglesa de Vialli (al Chelsea) y Ravanelli (Middlesbrough), ni a la alemana, curiosamente al Dortmund, de Vierchowod y Paulo Sousa. En su lugar llegaron el croata Boksic, el uruguayo Montero, el francés Zidane y los italiano Vieri y Amoruso. Una quinta que se diplomó a lo grande en la semifinal con el Ajax. Una eliminatoria que resolvió con un 6-2 global y que hizo al holandés Frank de Boer afirmar:" La Juventus es un equipo de otro planeta". Antes habían llegado otros hitos: el 6-1 a domicilio al París Saint Germain y el mismo resultado en Milán ante el Milan, la derrota más abultada en la historia del club milanista.

La Juve es una explosiva mezcla de potencia, talento y pasión dirigida desde el centro del campo por la pareja francesa Zidane-Deschamps, ya coronados campeones de Europa, en el Olímpico de Múnich, precisamente, con él Marsella en 1993. La composición de la delantera (Vieri-Boksic, Vieri-Amoruso o Amoruso-Boksic) no es tan importante.

A diferencia de la Juve, que acaba de revalidar su título de Liga, el Borussia llega a Múnich después de haberlo perdido a manos del Bayern. Esa frustración servirá de incentivo extra para los jugadores de Ottmar Hitzfeld, que necesitan la victoria para disputar la próxima Liga de Campeones. Aunque aceptan que la Juve parte como favorita, la calidad de Sammer -jugador europeo del año-, Kohler, Reuter, Moller, Chapuisat, Riedle y compañía.