Un jurado declara no culpable y deja en libertad al joven que mató a dos ertzainas

Mikel Otegi, militante de las juventudes próximas a ETA, descargó el 10 de diciembre de 1995 su escopeta de caza contra los ertzainas Iñaki Mendiluze y José Luis González, que murieron en el acto. Ocurrió en Itsasondo (Guipúzcoa). Ayer, ocho mujeres y un hombre, el primer jurado popular que actuaba en un caso vinculado a la situación de violencia en Euskadi, dictaron un veredicto de "no culpable" al considerar que Otegi, que estaba ebrio cuando ocurrieron los hechos, no era "en absoluto dueño de sus actos". El Gobierno ha ordenado al fiscal general que recurra. La sentencia ha causado rabia y estupor en medios políticos y jurídicos, abre una polémica sobre la institución del jurado y calienta los ánimos ante la "huelga general" convocada para hoy por HB.

"Dos hijos de puta menos". Así se refirió a sus dos víctimas Otegi, que ayer abandonó la cárcel acompañado por algunos familiares y entre gritos de "¡aúpa Mikel!" de una veintena de jóvenes. Mientras tanto, el hermano de uno de los ertzainas muertos, Iñaki Mendiluze, expresaba su impotencia y desesperación: "Les han dado licencia para matar a cualquiera". El ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, se hizo eco del "estupor de la sociedad", prometió que se recurrirá el fallo para que Otegi no quede impune y dijo que el Gobierno efectuará las "reformas legislativas necesarias" para que no se repita este "esperpento". El jurado se formó después de que la mayoría de los preseleccionados presentaran excusas para quedar fuera del caso. Jueces y fiscales de San Sebastián cuestionaban ayer abiertamente que esta institución pueda ser válida en estos casos. "Esta sentencia dispara la crispación y tensa aún más la situación" ante la "huelga general", ilegal, convocada para hoy por HB, aseguró un portavoz del sindicato de la Ertzainza Erne. La policía vasca ha multiplicado por tres sus efectivos en la calle para evitar incidentes.