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El Madrid reconoce que cerró la contratación del hijo de Sanz a espaldas de Obradovic

La denuncia de Zeljko Obradovic es cierta: Lorenzo Sanz, el hijo del presidente, le ha sido impuesto en la plantilla de baloncesto del Madrid. Miguel Ángel Martín, el director deportivo de la sección, reconoció ayer que el entrenador no fue informado: "Obradovic tiene razón, no se le informó. Pero tampoco hacía falta, para eso estoy yo aquí Y además, no era fácil localizarle [Obradovic fue seleccionador de Yugoslaria en los Juegos de Atlanta]". El jugador, muy afectado, manifestó: "Creí que estaba aquí por méritos propios; si no me quieren me voy".

"Este asunto no es bueno para nadie", afirmó ayer Zeljko Obradovic, "y se le está dando demasiada importancia". Pese a su inquietud, el entrenador del Madrid no modificó ni una de sus palabras del día anterior: "Desde luego, yo no pedí al jugador. Miguel Angel Martín me llamó cuando ya se le había fichado. Me dijo que era orden de Ferrándiz y ya está".Miguel Ángel Martín, el responsable de la sección de baloncesto del Madrid, admitió la versión de Obradovic, pero la restó trascendencia: "Es cierto, Obradovic no se enteró del fichaje de Lorenzo Sanz. Al serbio se le trajeron los jugadores que pidió, pero mi idea, además, era que los jugadores 11 y 12 del equipo fueran de la cantera. Y vimos que el jugador más cualificado era Lorenzo Sanz. Tiene razón, no se le informó. Pero tampoco hacía falta, para algo estoy yo aquí. Además, tuvimos dificultades de comunicación con el técnico". Obradovic ha dedicado su verano a preparar y dirigir a la selección de Yugoslavia que compitió en Atlanta.

Martín, que aseguró que el padre no tuvo nada que ver en el asunto, reconoció que el problema de su decisión era el nombre del elegido: Lorenzo Sanz, el mismísimo hijo del presidente. "Sabíamos que esto iba a ocurrir. Pero Sanz había sido la pasada temporada el mejor jugador del Canoe y el que más minutos había jugado, con una media de más de 20 puntos por partido. Si lo metíamos en el primer equipo se iba a decir lo de 'es el hijo del presidente'. Pero si no, habríamos tomado una decisión injusta. Puede que haya jugadores con mayor proyección, pero de menor edad y, por tanto, con posibilidades de seguir en el Canoe. Sanz (23 años) ya no podía quedarse allí".

De la versión de Obradovic, el único punto que rechaza Martín es que Pedro Ferrándiz -asesor de la sección- fuera el responsable de la orden: "Ferrándiz no dio orden alguna. El de la idea fui yo, aunque lo analizamos entre los dos".

Obradovic rechazó ayer responsabilidad alguna en el conflicto, aunque éste se abriera a partir de sus declaraciones: "Yo tengo que decir las cosas como son, no puedo mentir. Yo no di la orden de su fichaje, eso es todo. Pero antes de hablar con ningún periodista hablé con el jugador [extremo que niega el baloncestista]".

Obradovic no quiere plantearse ahora si, de haberle consultado el fichaje, lo hubiera rechazado o no. Al contrario, trata de liberar de toda responsabilidad al jugador y le defiende: "Ya estuvo con nosotros con anterioridad y muestra una actitud muy buena, extraordinaria. Con Mendoza al mando, Sanz ya jugó y se entrenó con nosotros, pero entonces no fue noticia. Como ahora es el hijo del presidente todo es más interesante. Pero por mi parte, ser hijo del presidente ni le va a favorecer ni le va a perjudicar. Si esto le ha hecho venirse abajo, que lo supere".

El jugador, hundido

El jugador, Lorenzo Sanz, el hijo, ciertamente se ha venido abajo. Tras recibir la mejor noticia posible, que subía definitivamente a la primera plantilla del Madrid, el sueño de su vida, todo se le ha roto. Se entrenaba con la mayor ilusión del mundo durante la pretemporada cuando por la prensa se enteró de la cruda realidad. Su entusiasmo se, derrumbó: " ¡Qué quieres que diga! Prefiero no opinar. Cuando leí las palabras de Obradovic la moral se me cayó a los pies. Si no me quieren, me voy. Pero me podían haber dicho las cosas claras. Sinceramente, siempre creí que estaba aquí por méritos propios"."No entiendo la reacción del entrenador", añade Sanz, "aunque lógicamente él es el encargado de hacer los fichajes. ¿Pero ahora qué hago? ¿Tiro la toalla? No puedo, me adaptaré a las circunstancias. Al menos, por los periódicos, ya sé lo que piensa el entrenador". El jugador habló ayer con su padre, que le llamó para darle ánimos.

Sanz, el jugador, supone que habría tenido ofertas de otros clubes. Pero no les dio tiempo: "Lo primero que me vino fue la oferta del Madrid y ya ni me preocupé. Para mí el Madrid es lo más, aún siendo el jugador 11. Y eso ya no me lo quita nadie. Los jugadores, que es lo mejor que tengo a mi alrededor, me han dado ánimos y me han dicho que no me preocupe". Y concluyó: "Mi apellido pesa mucho".

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