Martin Balsam, ganador de un óscar en 1965

El actor estadounidense Martin Balsam, alumno de Elia Kazan y óscar como mejor actor secundario en 1965, fue hallado ayer sin vida en la habitación del hotel de Roma en que se alojaba, informó la agencia AGI. Su muerte, confirmada por un empleado del hotel, parece que se debió a causas naturales.Balsam había nacido en Nueva York en 1919. Frecuentó el Actor's Studio y debutó en Broadway en 1941. Tras obtener éxitos en teatro y televisión, Elia Kazan, que había sido su maestro, le ofreció en 1954 la posibilidad de trabajar en el cine con un pequeño papel en La ley del silencio (On the Waterfront). Después de Doce hombres sin piedad (TweIve Angry Man), de Sidney Lumet, que lo da a conocer al gran público, trabaja en Al Capone, donde parece encaminarse hacia el papel de duro que repitió en varios filmes "ayudado de un físico bajo y grueso y de un rostro marcado", dice el Diccionario universal del cine de Fernaldo Di Giaminatteo. Pero con el detective Arbogats de Psicosis (1960), de Alfred Hitchcock, y sobre todo con Tutti a casa, de Comencini, "se desnudó de todo cliché y demostró su talento, comenzando una serie de papeles cada vez más exigentes".

De hecho, en 1965, Balsam recibió el óscar como mejor actor secundario por A Thousand Clowns, de Fred Coe. Entre las películas más conocidas que interpretó se encuentran Desayuno con diamantes, de Blake Edwards, Siete días de mayo (Seven Days in May), de J. Frankenheimer, Hombre, de Martin Ritt, Pequeño Gran Hombre, de Arthur Penn, Catch 22, de M.Nichols, y Todos los hombres del presidente (All the President's Men), de Alan Pakula.

Martin Balsam ha trabajado mucho en Italia desde los tiempos de Tutti a casa de 1960, a los que siguieron Confessione di un commissario de polizia al procuratore della Repubblica (1971) y L'avvertimento (1980), de Damiano Damiani y en la serie televisiva La Piovra, historias de mafia que se conviertieron en uno de los programas de mayor éxito de la RAI.-