_
_
_
_

¡Ya era hora!

Dos vecinos de El Escorial arreglan el reloj consistorial, parado durante 15 años

Las seis menos cuarto.Ésa era la hora que han señalado las manecillas del reloj consistorial en El Escorial durante: 15 años. Desde el lunes, todos los escurialenses pueden escuchar cada media hora las campanadas del reloj municipal por todo el pueblo.

"Me acabo de enterar de que lo han arreglado porque he escuchado las campanadas de las dos", comentaba el lunes una vecina cargada con bolsas de la compra. "El sonido de las campanadas del reloj le da vida al pueblo" explica Francisco Gómez, ferroviario jubilado de 80 años. La reparación del reloj municipal ha sido todo un evento en el pueblo.

El reloj llevaba 15 años parado. Se había estropeado por el uso continuado. Le faltaban varias piezas, y su mecanismo estaba completamente oxidado. Dos relojeros locales han realizado las obras de reparación: y restauración: David Iborra y Miguel Moyano. Entre ambos han dedicado 20 días a jornada completa para restaurar el reloj consistorial y ponerlo en marcha de nuevo. Han realizado esos trabajos sin cobrar, "para contribuir a la, mejora del pueblo", apuntan. "El pueblo se lo agradece con todo su cariño", contesta un paisailo. "La restauración ha sido laboriosa". El reloj llevaba 15 años parado, tenía el péndulo partido, la transmisión. desajustada y su mecanismo estaba oxidado", comenta Iborra. Para devolver al pueblo de El Escorial el sonido de las campanadas del reloj, ambos relojeros, han tenido que reconstruir las ruedas de sonería y de Romboi. Faltaban varios dientes en ambas ruedas. Los restauradores los reconstruyeron y los pegaran a las ruedas dentadas con soldadura de plata y con remaches.

David Iborra es un joven relojero de 20 años. Lleva tres años inmerso en el arreglo de relojes de todo tipo y de todas las épocas. "Lo que comenzó como una simple afición se ha convertido ahora en una forma de vida para mí" explica. Su maestro, a quien le debe todo lo que sabe, es el jefe de Restauración de Relojes y Autómatas del Patrimonio Nacional, José, Antonio Colón de Carvajal, quien ha reparado relojes del Palacio, Real.

La relojería Canseco construyó el reloj de El Escorial en 1946 como máquina de torre para el edificio consistorial y con cinco poleas en su mecanismo interno. El Ayuntamiento de entonces pagó 9.950 pesetas, por él. El alcalde popular Javier de Miguel ha manifestado que "tras el arreglo, el patrimonio artístico municipal ha recuperado una de sus más preciadas piezas".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_