"La pista te exprime"

Induráin lleva cinco días en el velódromo de Burdeos dando vueltas a la pista para saber si es capaz de superar el actual récord (52,713 kilómetros) del escocés Obree. Son jornadas agotadoras. Ayer tuvo lo que se llama un descanso activo, para no perder tono muscular. Fue en bicicleta a visitar a los futbolistas del Girondins, e incluso tiró un penalti.Pregunta: ¿Tan cansada es la pista?

Respuesta: Se hacen series a tope, que al final te exprimen mucho. Acabas realmente cansado, porque se utiliza un desarrollo que se agarra bastante. Las últimas series pesan de verdad.

P: ¿Mucha diferencia con la carretera?.

R: Sí, no sólo porque veinte minutos de pista puedan equivaler a una hora de carretera, sino porque aquí tienes que ir mucho más fino, no puedes despistarte, sino ir todo el tiempo concentrado en lo que estás haciendo. En carretera puedes ir por la derecha, por la izquierda, cambiar de desarrollo... Aquí, en cambio, todo el rato es lo mismo.

P: ¿Cómo se combate la monotonía?

R: No hacemos todo seguido, sino que el trabajo es más de series que de estar dando vueltas. Hacemos- series de cinco minutos, descansamos, cambiamos algún desarrollo... Por la mañana me entreno en carretera y a la pista sólo voy por la tarde, o sea, que no estoy metido todo el día dentro.

P: ¿Son trucos para evitar el aburrimiento?.

R: Sí, incluso algún día haremos tras moto.

P: ¿Llega a ser una obsesión seguir la línea negra que circunda la pista?

R: La raya sólo la ves al principio. Intentas seguirla, pero cuando quieres marcar unos tiempos, te olvidas de que tienes que ir sobre ella. Mecanizas todos los movimientos, incluso en la curva.

P: ¿Se acostumbra a ella?

R: En Burdeos, al ser más corta la pista, te tienes que inclinar más. Yo estaba acostumbrado a San Sebastián, pero ahora ya voy cogiendo también mejor la forma de entrar en la curva. Tomo unas referencias y cuando entro cojo ya la inclinación. A base de repeticiones mecanizo el gesto, aunque en alguna curva todavía me salga un poco.

P: ¿Cuando llega al velódromo entra con ganas?

R: !Hombre!, con ganas, con ganas... pues sí; vienes a ver cómo estás, cómo puedes prepararte, con ilusión, un poco a probar cosas.

P: ¿Y qué le va pareciendo?

R: La experiencia en sí es bonita, nueva, y se hace diferente a la monotonía del año, que hago siempre con lo-mismo. Luego viene la dureza y la dificultad de la empresa. El récord está en 52,7 kilómetros y rodar a esa marcha es difícil.

P: ¿Quiere decir que quizá no lo consiga?

R: Es dificil, es una marca alta. Yo todavía no he rodado a esa velocidad ni siquiera media hora; he hecho series de cinco minutos y rodar a ritmo de récord es complicado.

P: ¿Más de lo que esperaba?

R: Sí, sí, una hora a ese ritmo va a ser duro, pero ya sabía que iba a ser dificil. El adaptarte, el cambiar de ritmo y forma de preparación está siendo complicado. Aquí, en vez de entrenarme durante mucho tiempo, es por espacios cortos y a tope. No estoy habituado a esos esfuerzos.

P: ¿Le pesan desarrollos como el 59xl4?

R: Sí, se agarra.

P: ¿Cuándo decidirá si ataca el récord?

R: No sé, depende de Sabino (su médico y preparador). Estoy realizando un trabajo específico, no como en carretera, que entreno a mi aire.

P: ¿Pero la decisión de quien depende?

R. De mí.