NUÑEZ, A REMOJO
El mandamás del Barcelona, José Luis Núñez, ha puesto los problemas y el cuerpo al sol en Formentor (Mallorca). Es un enclave para ricos y artistas, de carretera complicada y playa recóndita. Está encerrado en una geografía abrupta. El triunfal presidente lee las historias sobre la caída de Mario Conde, que es vecino de veraneo en Pollensa. Anoche, Núñez y su segundo, Gaspart, charlaron durante una cena familiar. El menú fue de platos fuertes: caso Romario, la quinta Liga y, de postre, copos de merengue de euforia madridista. Núñez enfrió su ira en agua de mar.-
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