La montaña también es suya

Induráin va camino de conseguir su cuarto Tour, Ayer dio una lección de fuerza y doblegó a todos sus adversarios, sobre todo al único que le puede hacer sombra, Tony Rominger. Pero a diferencia de otros Tours ganados por el navarro, tras la etapa de Lourdes-Hautacan, la primera de montaña, Induráin ya lleva una ventaja sobre el segundo clasificado de casi cinco minutos.

La diferencia es que en los tres últimos años, después de la primera etapa de montaña, cuando Induráin se hacía con el liderato, su ventaja sobre el segundo clasificado era mucho menor que la obtenida ayer. En 1991, después de la etapa de Val Louron; Induráin cogió el maillot amarillo con más de dos minutos sobre el segundo, Gianni Bugno. En 1992, el navarro se enfundó el liderato en la etapa de Sestrieres, donde ganó Chiappucci. En la clasificación general, el italiano se colocó segundo, a 1,42 minutos del español.

El pasado año, Tony Rominger fue el que se alzó con el triunfo de etapa en Vilard D. Lans-Serre Chevalier, junto a Álvaro Mejía y Miguel Induráin con el mismo tiempo. El corredor del Banesto, sin embargo, se volvió a colocar líder, está vez con tres minutos y 8 segundos sobre Mejía, el segundo en la general.

Y es que el primer contacto con la montaña, donde supuestamente todos sus adversarios están en teoría más capacitados para doblegarle, le sirve a Induráin para de mostrar su supremacía.

Este año, además, las primeras cumbres han puesto demasiada tierra de por medio. Su diferencia con Rominger parece ya insalvable.