Críticas compatibles

Cinco de los diputados de IU-lC en el Congreso, todos ellos identificados con los postulados renovadores, asistieron a la convención: Ricardo Peralta, Narcís Vázquez, Jerónimo Andreu, Ramón Espasa y Diego López Garrido. Éste último defendió en la tribuna que la crítica frontal a la política social y económica del Ejecutivo debe ser compatible con la apuesta por llegar con el PSOE a grandes acuerdos sobre el impulso democrático en cuestiones "muy importantes para la salud de la izquierda", como la Justicia o la reforma de los partidos.López Garrido añadió que ello servirá, además, para "ir devaluando y minando" la política de alianzas del PSOE con CiU. Faltaron otros dos de los diputados de la órbita de Nueva Izquierda: Pedro Antonio Ríos y el dirigente del Pasoc Franco González.

Como estaba previsto, la convención sancionó la decisión de que Nueva Izquierda no se transforme en otro partido soberano dentro de IU, algo que despertaba muchos recelos internos, sino que reforzará su estructura interna como un "espacio de coordinación" estable de las propuestas renovadoras.