Orioli y Arcarons se juegan el triunfo en la última prueba cronometrada

Hoy es el día decisivo. Después de 15 días por África y de 13.000 kilórnetros, el Rally París Dakar-París, disputa su última prueba cronometrada y en ella Jordi Arcarons, y Edi Orioli todavía deben pelear por cada segundo para conseguir el triunfo en motos. Ayer, en la etapa de Granada, donde se congregaron 5.000 aficionados según la policía, el español recortó su desventaja a 1m 47s. La tiene muy difícil, pero su victoria todavía es posible. El terreno de los últimos 42 kilómetros, le favorece.

Arcarons va a intentar una misión casi imposible. En cualquier caso, este rally, uno de los más largos y duros, va a decidirse el último día y tan sólo por una diferencia de escasos segundos. Al final, la emoción de la carrera está salvando la desorganización de la prueba.La desventaja con que Arcarons afronta la última etapa, 1 m 47s, podría haber sido menor y, en consecuencia, el desenlace aún más incierto. Sin embargo, ayer, en la segunda de las pruebas cronometradas que se desarrollaron cerca de Granada, al catalán le abandonó la suerte. El cable del acelerador de su Cagiva se rompió en el momento menos oportuno y eso le costó medio minuto precioso. Arcarons había recobrado su esperanza al ganar la primera cronometrada del día, la larga, la complicada. En 70 kilómetros le sacó 1m 42s a Orioli y se acercó a poco más de un minuto del italiano. Todo era posible. Con el segundo tramo granadino, de 6, y el día de mañana por delante, tenía margen suficiente para dar la vuelta a la situación. Sobre todo, porque las características del terreno le favorecían.

Después del tropezón de la segunda prueba, en la que el vencedor fue Orioli, Arcarons va a agotar hoy sus posibilidades. El recorrido en Chateau-Lastours, en el sur de Francia, cierra la competición, aunque todavía quedará el enlace hasta París y el paseo de mañana por Eurodisney.

En coches, las estrellas fueron los Citroën, que se disponen a conseguir el doblete con los franceses Pierre Lartigue, el líder, y Hubert Auriol. Ayer volvieron a dominar. Mientras tanto, Ramón Dalmau (Mercedes) lucha por ser el séptimo.

La caravana volvió a ser aclamada ayer en su travesía por España, desde Granada, donde había sido recibida de madrugada por unos 5.000 aficionados, hasta La Jonquera.