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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

"Pobrecitos taxistas"

Desearía me publicasen esta carta en beneficio de los sufridores que, por necesidad, cogen un taxi.Ayer, domingo, hizo 15 días que cogí uno de los mencionados vehículos en la clínica Fundación Jiménez Díaz. El trayecto fue hasta la calle de Hortaleza. No llevaba cambio y le di 5.000 pesetas. La carrera eran 600. Me comentó con muy mal genio que vaya una moneda que le daba (por alta, supongo). Me dio el cambio de mil, y la verdad, yo, distraída, me bajé del taxi. Dicho sea de paso, era un vehículo muy viejo de Radio Taxi Cooperativa Azul, y no se veía ni el taxímetro, ni el salpicadero, ni sus manos, pues en caso contrario me hubiese dado cuenta de ver los billetes del cambio. Huyó con el cambio, y hasta hoy. Pero me quedó algo muy significativo, ya que no pude tomar la licencia ni nada. Era un hombre de unos cincuenta años, con una perilla en la barba muy singular, estilo rabino o judío, casi blanca. Y repito que era un Radio Taxi de la Cooperativa Azul. Algún compañero le reconocerá y le dirá la poca vergüenza que tuvo.

Digo esto a colación del programa último de televisión de Cristina Morató, donde se pone a los taxistas como pobres víctimas del asalto. Y cuando ellos asaltan, como a mí, ¿quién les pide cuentas?

Y en cuanto a su simpatía, salvo excepciones, deja mucho que desear.

El caso es que la carrera de 600 pesetas me costó 4.600. No hay derecho.-

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