Francia tendrá un canal educativo público y uno informativo privado

El fracaso de La Ciriq reveló que en Francia no había espacio para demasiadas cadenas de televisión generalistas. Tras haber sido explotada por Berlusconi, Robert Hersant y Hachette, La Cinq desapareció hace ya casi un par de años. Ahora, dos iniciativas, una pública y otra privada, intentan demostrar que en el paisaje audiovisual francés existe, en cambio, hueco para cadenas especializadas. El primer ministro, Édouard Balladur, ha anunciado el nacimiento de una cadena pública destinada a la educación. Un grupo privado prepara entretanto el lanzamiento de una cadena consagrada a la información permanente.

La futura televisión educativa deberá comenzar a emitir a partir del otoño de 1994. Ocupará parte del, hueco dejado por la desaparición de La Cinq. El resto de ese hueco, a partir de las ocho de la tarde y hasta después de la medianoche, ya está ocupado por Arte, la cadena pública de contenido cultural promovida por Francia y Alemania. El quinto canal francés no volverá, pues, a manos privadas, sino que estará controlada por los poderes públicos y se dedicará en las horas diurnas a la educación y en las nocturnas a la cultura.La futura "televisión del conocimiento y la formación", como Balladur la bautizó el pasado miércoles, era un sueño de la izquierda. Por eso, Jack Lang, ex ministro socialista de Cultura, declaró: "Estoy muy feliz al ver reanimado el proyecto de cadena educativa. Una idea de la izquierda va a ser realizada por la derecha". El proyecto parte de la constatación de que muchos países industriales ya tienen canales educativos. Es el caso del Reino Unido, con la cadena de la Open University; Canadá, con Ontario TV; Japón, con la NHK, y Estados Unidos, con The Learning Channel.

Revalorizar la escritura

Los programas de la televisión educativa francesa podrán verse a través de la red hertziana en todo el país sin necesidad de ningún tipo de descodificador o antena parabólica. Su presupuesto inicial será de unos 800 millones de francos (18.400 millones de pesetas). El Estado, según confirmó ayer Alain Carignon, ministro de Comunicación, será su principal accionista, como ya lo es de Arte, la cadena cultural franco-alemana. No obstante, diversos editores contribuirán a su financiación, puesto que, como subrayó Carignon, la futura cadena también tendrá como misión "revalorizar la escritura".Esta cadena estará destinada a estudiantes, jubilados, parados y campesinos alejados de las escuelas. Encargará buena parte de sus programas a sociedades de producción privadas y recibirá el apoyo de las dos grandes cadenas públicas generalistas: France 2 y France 3.

Por otra parte, la cadena privada generalista TF-1 anunció ayer el lanzamiento el próximo año de una cadena de información permanente en francés. Esta cadena, inspirada tanto en el modelo de la cadena norteamericana CNN como de la emisora de radio francesa France-Infos, sólo podrá ser vista por los que dispongan de cable o antena parabólica. "Esa cadena", dijo Étienne Mougeotte, vicepresidente de TF-1, "será únicamente francófona porque no hay realidad europea en materia de información. El fracaso de Euronews lo prueba". El proyecto está "abierto" a la participación de Canal Plus Francia, según Mougeotte.