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La UEFA levanta a Jesús Gil la suspensión de seis partidos

El Jurado de Apelación de la UEFA (Unión Europea de Asociaciones de Fútbol) absolvió ayer al presidente del Atlético de Madrid, Jesús Gil, de la suspensión de seis partidos, pero ratificó las sanciones de seis, cinco, cuatro, tres y dos encuentros de competiciones europeas a sus jugadores Juanito, Schuster -a partir de la próxima temporada en el Bayer Leverkusen alemán-, Tomás, Toni y Vizcaíno, respectivamente. Los castigos fueron impuestos el pasado 3 de junio por el Comité de Disciplina de la UEFA tras los incidentes que protagonizaron en el Parma-Atlético de Madrid, en semifinales de la pasada Recopa.

El Atlético de Madrid y sus jugadores sancionados apelaron el castigo, cuyo recurso fue resuelto ayer. El club, por el contrario, deberá abonar, al no recurrirla, una multa de 66.000 dólares, casi ocho millones de pesetas que le impuso la UEFA "por conducta inconveniente de varios jugadores no identificados contra el árbitro del encuentro, el alemán Harold Schmidhuber al término del partido", según señala un comunicado del máximo organismo europeo de fútbol. El árbitro, que también prestó ayer declaración, aseguró en el informe del partido "haber sido perseguido por representantes del Atlético, en particular por su presidente". El equipo madrileño, además, tendrá que pagar otros 16.000 dólares, cerca de dos millones de pesetas, a la UEFA por gastos de procedimiento.La Comisión de Disciplina de la UEFA suspendió a Gil "por haber participado con otros dirigentes del Atlético en el clima de inseguridad en el pasillo de los vestuarios al término de su partido con el Parma", en el que, pese a ganar por 0-1 en la localidad italiana, fue eliminado y no pudo disputar la final de la Recopa. Gil, además, contó con el agravante de una sanción anterior, del 16 de noviembre de 1990, de 18 meses de inhabilitación por injuriar al ex arbitro francés Michel Vautrot.

Un portavoz del Jurado de Apelación de la UEFA, Rene Eberle, indicó ayer que Gil ha sido absuelto por "falta de pruebas suficientes", ya que éste había sido suspendido por evitar a la dirección del club que arremetiese contra el árbitro alemán.

Gil, por su parte, explicó ayer en Ginebra, ante el Jurado de Apelación, que su comportamiento fue mal interpretado y que se sumó al grupo de sus jugadores para apaciguar sus ánimos y los de otros responsables del club.

Tomás, capitán del Atlético en el partido frente al Parma, después de conocer la ratificación de su sanción y las del resto de compañeros, con los que viajó ayer a Ginebra, comentó: "No nos han hecho ni caso, a pesar de las pruebas presentadas y que el colegiado alemán no me reconoció en el careo que mantuvimos con él y se contradijo con uno de sus jueces de línea". Tomás se mostró contrariado con la decisión del Jurado de Apelación de la UEFA porque "su actitud desde el principio no fue muy positiva y no quiso ver el vídeo del partido donde se demuestra que yo no tuve nada que ver con los incidentes".

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