Callado acusa a los guerristas de echarlo con engaños y ofreciendo cargos

El ex presidente del Gobierno de Murcia Carlos Collado ha culpado a su sucesora, María Antonia Martínez, y al secretario regional del PSOE, Juan Manuel Cañizares, de estar entre los principales instigadores de su derribo. La campaña de acoso, según Collado, la iniciaron los guerristas hace dos años, y para recabar apoyos se: utilizaron engaños en algunos casos y, en otros, "muy probablemente, los han comprado ofreciéndoles cargos".Collado, en una extensa entrevista concedida al diario local La Verdad, habla por primera vez de la crisis que acabó con su dimisión. Lo hace después de las elecciones del 6-J, en las que el PP ganó por primera vez en la región de Murcia, un bastión tradicional de voto socialista. El ex presidente se muestra satisfecho por la decisión de los tribunales, que han archivado la querella de Izquierda Unida por el asunto de Casa Grande, en la que se le acusaba de varios delitos de prevaricación, cohecho y malversación. "Ahora", dice, "una vez que está a salvo mi honorabilidad y mi honra, así como reconocida la legalidad de las actuaciones de mi Gobierno, y mías, los ciudadanos tienen derecho a una explicación".

Collado asegura que dos días después (le que fuera investido presidente de la comunidad de Murcia, en 1991, se inició una campaña desde la dirección regional del. PSOE de caza y captura contra él: "El lema era '¡a por el presidente!". Así de sencillo".

El ex presidente reconoce que él había estado muy próximo a Alfonso Guerra, pero la dirección regional del PSOE, "que se proclama de un guerrismo duro y a ultranza", no le perdonó que organizara unas jornadas sobre Maastricht en las que sólo participaron ministros renovadores y que fueron clausuradas por Narcís Serra.

A la pregunta de por qué no buscó el apoyo de Felipe González, Collado revela que habló con él en los funerales de don Juan, y el líder socialista le dijo: "No te voy a decir nada, ni como presidente del Gobierno, ni como secretario general del partido. Como Felipe González sí te digo que lo que te han hecho es impresentable. Pero está hecho. Y tú debes actuar en consecuencia".

Dirección regional

Collado acusa a la dirección regional del PSOE de "engañar" para conseguir derribarlo. Y cita expresamente al secretario regional socialista, Juan Manuel Cañizares; a la presidenta de la comunidad autónoma, María Antonia Martínez; al presidente de la Asamblea regional, Miguel Navarro, y ad portavoz parlamentario del PSOE, Ramón Ortiz.

Casa (Grande fue una excusa, según el el presidente, que sirvió a sus rivales para ir por las agrupaciones socialistas diciendo que el presidente era un corrupto y que la ejecutiva federal mandaba quitarlo. El mismo argumento sirvió, según la versión de Collado, para que el grupo parlamentario firmara un escrito (cuyo contenido exacto no se ha hecho público) en el que se le censuraba o reprobaba. La dirección del PSOE en Murcia contó para esta operación, según Collado, con el apoyo de Rafael Delgado, secretario de Alfonso Guerra.

Carlos Collado, que es el segundo presidente socialista de Murcia que dimite forzado por su partido (el anterior fue Andrés Fernández Ros, en 1984), ha vuelto a su anterior actividad: profesor de Filosofía en un instituto de bachillerato. Declara que como presidente ganaba 400.000 pesetas al mes. Ahora, con antigüedad incluida, gana 230.000 pesetas al mes como profesor más otras 100.000 por dietas como diputado regional.