La primera escudería española pretende aspirar al Mundial dentro de cuatro años

Jaime Magrans presidente de Bravo F 1 España, SA, primera escudería de fórmula 1 con capital español, afirmó el domingo en Adelaida (Australia) que su meta es luchar por el campeonato mundial en un plazo de cuatro o cinco años.Aunque el dinero que financie la aventura proceda de empresarios españoles, ni el lugar de fabricación, ni los motores, ni los pilotos serán, por el momento, españoles. "Técnicamente el equipo estará basado en Gran Bretaña, ya que hemos llegado a un acuerdo con la empresa Simteck, que construirá el chasis. Ha sido una decisión empresarial, ya que sabemos que estando en Gran Bretaña tenemos ganados varios años de tiempo. Nuestra meta es poder luchar por el campeonato del mundo dentro de cuatro o cinco anos, y con esos Fines hubiese sido utópico intentar hacerlo en España y con gente española", dijo Magrans, de 34 años, que es importador oficial de Ducati para España y al mismo tiempo importa para Andorra Cagiva, Huqvarna y Morini, y encabeza un grupo de empresarios y empresas, cuyos nombres no ha querido desvelar, que están involucrados en este proyecto, cifrado en unos 2.000 millones de pesetas.

Aunque no descarta una posible participación del piloto español Jordi Gené en temporadas venideras, Magrans desea encontrar conductores experimentados para su año de estreno. "Nos gustaría contar con alguno experimentado, como Boutsen o De Cesaris, y algún otro piloto de renombre, ya que lo que necesitamos son pilotos con experiencia", declaró. "Con Gené no hemos hablado, ni sabe nada de nuestro proyecto, al menos hasta ahora. El tema de Gené lo vamos a tratar con mucho cariño; no queremos perjudicar al piloto español en su carrera deportiva. Creo que no sería interesante para él, en estos momentos, integrarse en un equipo que comienza a andar. A Gené nos gustaría ofrecerle un volante cuando dispongamos de un coche competitivo, y eso no quiere decir que el año próximo no lo pueda ser".