Núñez hace un llamamiento público a la unidad

El presidente del Barcelona, Josep Lluís Núñez, hizo un llamamiento a la unidad al finalizar el partido, y aseguró que la eliminación de la Copa de Europa no supone "ninguna modificación referente a las ideas" que tiene claras "desde hace mucho tiempo", aunque no quiso revelar cuáles son estas intenciones hasta dentro de dos meses. "Yo no me guío por los resultados, sino que medito las cosas durante el ano, y no voy a decirlas ahora porque hemos perdido. Sólo digo que lo tengo muy claro, y no lo cambiarán los resultados", matizó. "Pero ahora, más que nunca se trata de mantener la unidad de todos, del equipo, del técnico, de todos"."Estoy muy triste porque es duro asumir esto", explicó el mandatario azulgrana; "pero yo le tenía mucho miedo a este partido porque el ambiente, el entorno, me decía que era peligroso. Además, las primeras eliminatorias siempre son peligrosas, porque los contrarios están más rodados".Núñez intentó en todo momento mantener la compostura cuando se le preguntó por sus discrepancias con Cruyff. "Yo siempre le he. dado mi apoyo", respondió. "Lo único que quiero es que se centre en el club [sic]... Lo que pienso no lo diré". "Reitero que hay que mantener la unidad", insistió. "La eliminatoria no debe cambiar nada. Ahora se necesita mucha tranquilidad en el vestuario y con los técnicos".600 millones de pérdidas

El presidente azulgrana explicó que el fracaso tenía una mayor trascendencia deportiva que económica, pese a que el club dejará de ingresar unos 580 millones de pesetas: 180 millones que abona la UEFA por la clasificación en la liguilla final y 40 millones de pesetas que se cobran por cada uno de los puntos conseguidos en esta fase de la competición.

"Es lamentable, pero hay que asumirlo", agregó luego Núñez, en veladas referencias a Cruyff. "También hay otras cosas que lamento y ya están hechas, pero por respeto a la entidad no voy a decir lo que no me ha gustado. Pienso, en cualquier caso, que nos distraemos demasiado en otras cosas. Yo soy quien debe tener más moral, ahora que es un momento difícil. Pero no pienso extenderme más porque cuando hablo de mantener la disciplina, ustedes [refiriéndose a la prensa] dicen que me enfrento con el entrenador. Yo debo aplicar los mecanismos necesarios para que ustedes estén callados y se mantenga la disciplina en el club. Hoy voy a dar ánimos al entrenador y a los jugadores".

"Ha sido un golpe durísimo que vamos a arrastrar todo el año", sentenció Koeman. "Tenemos un buen nivel, pero nos falta mucho para llegar arriba".

"Es un trauma que hay que superar entre todos", advirtió el capitán azulgrana Andoni Zubizarreta. "Lo que ha pasado es que somos un equipo que no juega a amarrar".