Samaranch optará en 1993 a su reelección en el COI

La decisión ya está tomada. Juan Antonio Samaranch, presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), optará a la reelección de su cargo durante la sesión que el COI debe celebrar en septiembre. de 1993 en Montecarlo. Una vez evaluadas las circunstancias de su actual estado físico y con el asentimiento ampliamente mayoritario que obtiene su candidatura entre los miembros del COI, Samaranch tratará de llegar como presidente a la cita de Atlanta, en el verano de 1996.

Atlanta tiene para Samaranch un alto valor simbólico: en 1996 se cumplirán 100 años de la reinstauración de los Juegos y de la culminación de la iniciativa del barón de Coubertin, llamado El Renovador en el argot olímpico.Convencido de que después de Coubertin nadie como él ha acometido una renovación tan profunda del movimiento olímpico, Samaranch pretende grabar en la ciudad estadounidense la imagen definitiva de su larga carrera deportiva: Pierre de Coubertin y él mismo, unidos en el tiempo por un vínculo de 100 años, y con un mismo anhelo de fidelidad a los orígenes olímpicos y de voluntad de transformación.

Hasta tal punto Atlanta es la meta que Samaranch examina en estos momentos la posibilidad de no agotar totalmente su mandato-que acabaría formalmente en 1997- y ceder el relevo a su sucesor inmediatamente después de celebrada la 26 edición de los Juegos Olímpicos de verano. En 1996, tendrá 76 años. Una edad avanzada, pero todavía inferior a la de dos de sus antecesores en el cargo, el sueco Edstrom, que se retiró con 81 , y el estadounidense Avery Brundage, que abandonó con 84.

La posibilidad de agotar su mandato remite otra vez a su salud, pero también a la necesidad de generar una alternativa sucesoria sólida. Hoy por hoy, ningún experto en asuntos olímpicos se atreve a señalar con garantías mínimas quien puede ser su sustituto y, sobre todo, cuál debe ser el proyecto de ese sustituto en un movimiento olímpico acosado por gran número de incertidumbres.

Por otro lado, el. COI ha presentado una querella contra los dos periodistas británicos que han escrito el libro The lord of rings y, donde, a juicio del COI se vierten comentarios injuriosos contra sus miembros.