El Grupo March reforzará sus recursos propios tras vender en tres meses activos por 78.000 millones

El Grupo March ha vendido en los tres últimos meses una serie de participaciones industriales y financieras por valor de 78.000 millones de pesetas, lo que permitirá reforzar considerablemente sus recursos propios. Con estas ventas el grupo da por cerrado un ciclo de desinversiones para comenzar la búsqueda de nuevos caminos, según fuentes de] mismo, que añaden que ahora se volcarán en la gestión y en la concentración de inversiones.

Tras la expansión que se vivió en los años comprendidos entre 1985 y 1990 ahora soplan vientos peores para la actividad económica y el Grupo March ha optado por comenzar el nuevo ciclo plegando velas en sus negocios. La venta del Banco de Progreso a la Caixa, que le reportará 14.000 millones, es el último capítulo de un largo rosario de desinversiones con "el que se pretende reforzar los recursos propios del grupo mientras se estudian nuevos caminos", dicen sus responsables. La Corporación Financiera Alba, que reúne las participaciones industriales y financieras del grupo, ha repetido dividendo durante 1991. Alba obtuvo durante ese ejercicio unos beneficios consolidados de 10.418 millones de pesetas, con una caída del 12% sobre el año anterior. Varios factores han incidido en ello. "El enfriamiento económico y el descenso de algunos productos químicos han producido caídas en los resultados de algunas empresas participadas", señala Juan March, presidente de Alba, en carta a los accionistas.

Carlos March entiende que una corporación industrial no es una foto fija y que la propia esencia de una corporación radica en la continua búsqueda de rentabilidad en cada momento. Los March consideran que es un momento propicio para concentrar inversiones y para rebajar lo más posible el crédito externo bancario. De todos modos, se comienza ya a estudiar nuevas inversiones pese a que el periodo de maduración no sea menor a cinco años, según fuentes del grupo.

Ventas continuas

En febrero pasado los March vendieron por 12.000 millones de pesetas el 15,5% que poseían en el banco norteamericano Signet Bank. Tan sólo un mes después cerraban la venta del 22% de Cervezas San Miguel al grupo francés BSN por 14.150 millones. La semana pasada se vendieron los saltos eléctricos de Aragonesas a Endesa por 38.000 millones. Las tres grandes desinversiones de 1992 se vieron precedidas por la venta, en abril de 1991, del 14% de Finanzauto. Justo un año antes los March se desprendieron del 100% de los almacenes Simago por 13.500 millones. En 1990 los March vendieron su 50% a National Westminster.

En estos momentos, señalan fuentes directivas del grupo, se ha entrado en un proceso de desinversión que busque "las máximas plusvalías no sólo para el primer accionista de Alba, el Grupo March, con un 55%, sino para los 15.000 accionistas minoritarios que completan el capital y que cotiza en Bolsa."

Los March afirman que los sectores para apostar son el de distribución, la telecomunicación y comunicación audiovisual, el financiero, el turístico / ocio y la ecología y medio ambiente. A pesar de que el grupo recalca que se han hecho nuevas inversiones, éstas son muy pequeñas comparadas con las ventas. Así, en el cuarto trimestre del 1991 se amplió participación en San Miguel, Banco del Progreso (hoy vendidas) y Media Planning, donde se controla ya el 49%. Se han dedicado 2.000 millones de pesetas a aumentar su participación hasta el 36,6% de Aki Bricolage. Otros 2.000 millones de pesetas fueron a la ampliación de capital de Pryca para mantener el 10%.