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El 'agujero' de la inmobiliaria Uribitarte se dispara hasta 7.719 millones de pesetas

El agujero económico de la promoción inmobiliaria de Bilbao Uribitarte SA, asciende a 7.719 millones de pesetas, según se desprende del balance de situación de la sociedad de finales de 1991 presentado en la junta de acreedores que tuvo lugar ayer en la capital vizcaína. El déficit patrimonial se ha disparado más de 2.000 millones frente a lo barajado por los acreedores desde que se declaró la quiebra necesaria en noviembre.Los 61 acreedores que acudieron ayer a la junta nombraron a los tres síndicos que se encargarán de administrar el proyecto inmobilario. Los promotores del plan de viabilidad lograron colocaron a un síndico y los grandes acreedores presentes -Dragados y Construcciones, Crédito y Caución, Mapfre y Elkarkidetzanombraron a los dos restantes.

El activo de la sociedad asciende a 7.008 millones, mientras que el pasivo es de 14.728 millones. La partida más importante del activo es la de obras en curso, 4.687 millones, el 30% del precio final del edificio, valorado en 15.624 millones.

La sala de vistas del juzgado de primera instancia número 3 se transformó ayer en una cumbre de abogados de los mejores bufetes del país. La sesión duró dos horas y los 61 acreedores reunidos, que representaban 10.686 millones de pesetas de los 14.728 de pasivo total, nombraron tres síndicos. Los grandes acreedores, a excepción de Caja Postal que no acudió a la junta, sacaron adelante sus dos síndicos pactados: Fernando Gómez Martín y Carlos Olazábal, ambos propuestos por el grupo Mapfre. Los 14 votos representaban 7.524 millones de la deuda total.

La incertidumbre estuvo en el síndico que representará a partir de ahora a los pequeños acreedores, los que más tienen que perder, al carecer de seguros de caución. Asís Garteiz, canditato triunfador por 25 votos, fue propuesto por uno de los promotores del último plan de viabilidad para el edificio Uribitarte. Los 16 acreedores que votaron a Javier Imaz, entre ellos el del Ayuntamiento de Bilbao -con una deuda de 881.000 millones-, se demostraron al final insuficientes. El tercer candidato, Emilio Cerecedo, presentado por la sociedad que instó la quiebra, Baltic Trust, sumó cuatro votos.

El comisario de la quiebra, Javier Santamaría, anunció que los siguientes pasos serían juntas para el examen de créditos y su graduación. El juez tendrá que determinar si la quiebra es fraudulenta, como se prevé, y la fecha de retroactividad de la misma. César Gil, cabeza visible del plan de viabilidad, señaló que "hay que retomar el proyecto Uribitarte en un mínimo de dos meses y un máximo de cuatro".

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