Los auditores del Grupo Torras discrepan en la forma de contabilizar 27.868 millones de beneficios
La auditoría correspondiente a 1990 del Grupo Torras, cabecera de KIO en España, presenta una discrepancia sobre la forma de contabilizar 27.868 millones de pesetas que la empresa consideró beneficios. El Grupo Torras presentó unos resultados positivos de casi 4.000 millones de pesetas, pero, según los expertos consultados, de tenerse en cuenta la salvedad el resultado podría convertirse en unas pérdidas de casi 24.000 millones. Fuentes del grupo han restado importancia al tema al considerar que la diferencia se debe a la mera aplicación de distintos criterios contables. Añaden que en cualquier caso, los resultados hubieran sido positivos "porque aún tenemos muchos beneficios latentes que no hemos aflorado".
La discrepancia entre los auditores y los contables del Grupo Torras proviene de la fusión realizada entre Ebro, Agrícola y Azucarera Ibérica, que dio como resultado una nueva empresa denominada Ebro Agrícolas, Compañía de Alimentación. Antes de afrontar esa operación, el Grupo Torras poseía un 51% de Ebro. Una vez concluida la fusión, Torras pasó a controlar el 40% de la nueva sociedad.Según el grupo la operación de fusión consistió en la venta del 51% de Ebro, que se utilizó como pago para la compra del 40% de la nueva sociedad. Este movimiento le reportó al Grupo Torras un beneficio adicional de 27.868 millones de pesetas.
Sin embargo, esta práctica contable no es compartida por la auditora Coopers & Laybrand. "Este tratamiento no está previsto en la normativa contable vigente, que en la actualidad no regula de manera específica el tratamiento contable de fusiones. En estas circunstancias opinamos que debería haberse mantenido el valor contable: de la participación original", señala textualmente la auditoría en su punto tres.
Fuentes del Grupo Torras argumentan que esta matización de Coopers & Laybrand proviene de que "los criterios contables que utilizamos son distintos a los suyos. Nuestras directrices provienen de Touche Ross, la empresa que audita a KIO a nivel internacional".
En caso de que no se contabilizara como beneficio la partida de la polémica, se produciría una revolución en la cuenta de resultados del Grupo Torras, pues los 3.963 millones de pesetas de beneficios pasarían a convertirse en pérdidas de 23.905 millones, según expertos consultados.
Idéntica salvedad se recoge en la auditoría del balance consolidado del Grupo Torras más sus filiales. En este segundo caso la partida mal contabilizada, fruto también de la fusión de las azucareras, en opinión de la auditora Coopers & Lybrand, asciende a 33.730 millones de pesetas, con lo que el resultado consolidado final de 3.441 millones de beneficios se podría transformar en unas pérdidas de 30.289 millones.
La opinión del auditor no tiene ningún efecto directo en el balance del Grupo, puesto que fue aprobado en la última junta general celebrada en el mes de julio, según fuentes del Grupo Torras. Decir que la aplicación del criterio defendido por el auditor supondría entrar en pérdidas "es llevar demasiado lejos la opinión de los auditores", dicen fuentes de Torras. "En cualquier caso", añaden, "nuestros resultados hubieran sido positivos porque aún tenemos muchos beneficios latentes que no hemos aflorado".
Por otra parte, la memoria del Grupo Torras recoge el compromiso de efectuar "con partes relacionadas" una operación de compra-venta con fecha tope en diciembre de 1992 de casi 22 millones de acciones propias, valoradas en 47.000 millones de pesetas. En esa misma memoria se detalla que de los créditos a partes relacionadas, casi 42.000 millones, están concedidos a compañías que tienen en su poder acciones del Grupo Torras.
Ercros
La auditoría de Coopers & Laybrand también destaca el caso de una de las compañías asociadas al Grupo Torras, Ercros. El informe señala que "no es posible determinar si las provisiones registradas en las cuentas anuales de Ercros y sus filiales son suficientes para cubrir los costos" del proceso de restructuración que está llevando a cabo. Además, dice que "existen incertidumbres respecto a subvenciones recibidas en relación con este proceso e incluidas como beneficios".El Grupo Torras, cuyo vicepresidente es Javier de la. Rosa actúa como un hólding patrimonial del que depende el 100% de Torras Papel, el 39% de Ercros, el 40% de Ebro Agrícolas, el 40% de Erpo, el 100% de Coma Cros, el 44% de Prima Inmobiliaria, el 50% de Beta Capital y el 55% de Seguros Amaya. Al margen de Torras, KIO posee algo más del 1% del Banco Santander. En conjunto, el conglomerado que posee la sociedad kuwaltí en España supone unos activos de casi 700.000 millones de pesetas.
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