Mercader deja un INI saneado, pero pendiente de definir su estrategia industrial

El Instituto Nacional de Industria (INI) iniciará mañana sábado una nueva etapa tras el relevo en la presidencia de Jordi Mercader por Javier Salas Collantes aprobado ayer por el Consejo de Ministros. Durante la etapa de Mercader, el INI ha consolidado su recuperación permitiendo avanzar hacia la creación de una gran corporación industrial. La incorporación de Salas -un técnico que lleva 17 años

En la etapa de Mercader, el INI ha consolidado los beneficios y ha conducido al grupo a convertirse en una corporación industrial cuyo objetivo primigenio es alcanzar niveles de competitividad en el mercado europeo de forma desvinculada a los presupuestos generales del Estado. La orientación de Mercader, marcada por las etapas de saneamiento de sus antecesores, se ha basado en la búsqueda de rentabilidad y la introducción de criterios de gestión de empresa privada. En ese sentido, se ha caracterizado por la potenciación de una política de innovación tecnológica que se ha plasmado, principalmente, en el incremento del esfuerzo inversor en investigación y desarrollo, que en 1989 alcanzó cerca de 40.000 millones de pesetas.En los dos años y dos meses largos que ha estado al frente del INI, Mercader ha tratado de implantar un nuevo esquema organizativo basado en cuatro áreas de negocio (industrias de servicio, de equipamiento, de proceso y de apoyo corporativo) con un director general al frente de cada una. Esta estructuración ha estado acompañada por la continuación de la política de desinversiones y entrada en segmentos de interés estratégico, lo que ha supuesto la creación de 13 empresas (Infoinvest, SAES, ITP Turbopropulsores y Binter, principalmente).

La última empresa constituida ha sido INI Medio Ambiente, dedicada a servicios de ingeniería de ámbito nacional e internacional con el objetivo de atender la demanda que exige el cuidado del medioambiente. Asimismo, se ha creado Tecnología Grupo INI para investigación aplicada y servicios tecnológicos.

En la etapa de Mercader el INI se desprendió de Oleaginosas Españolas (OESA), por 2.450 millones de pesetas; de la Enfersa, de la que mantiene el 20%, por 7.440 millones de pesetas; del grupo alimentario Endiasa (incluye Carcesa, La Lactaria, Fridarago y Coisa), vendida a Tabacalera por 15.500 millones de pesetas; el grupo de maquinaria ferroviaria, compuesto por La Maquinista Terrestre y Marítima (MTM) y Ateinsa, en las que tiene todavía el 15%, por 3.580 millones de pesetas, y Astilleros de Canarias (Astican), por 660 millones.

Balance

En los dos ejercicios que ha cerrado Mercader, el INI ha tenido beneficios de 3 1.000 y 82.300 millones de pesetas, lo que cerraba una racha de varios años de recuperación, que comenzaron con 204.000 millones de pérdidas. Este año, sin embargó, el crecimiento se ha visto truncado por el enfriamiento de la actividad económica nacional e internacional. Los beneficios previstos para este año no superarán la mitad de los del año pasado, según han reconocido fuentes del propio INI.El propio Jordi Mercader subrayó ayer, en su despedida de todo el equipo directivo y personal del INI, que la situación actual no es todo lo buena que cabría desear. "El INI y el país entran en una época bastante más dificil que la que me ha correspondido atravesar a mí", dijo, para añadir: "si algo me preocupa es no haber podido dejar esto en una coyuntura mejor".En cualquier caso, Mercader tampoco se ha podido ir con la satisfaccción de conseguir aumentar las subvenciones para el instituto de 90.000 a 125.000 millones de pesetas. Al final, únicamente se han elevado en 8.000 millones, lo que, a juicio de algunas fuentes consultadas, habría servido para potenciar las inversiones tecnológicas y amortiguar algunas caídas bruscas.

En el descenso ha tenido especial incidencia la recesión económica mundial que ha provocado que la actividad comercial de las empresas del grupo no haya podido ser igual. En especial destacarán los cerca de 15.000 millones de pérdidas que arrojará este año la Empresa Nacional de Autocamiones (Enasa), fabricante de los camiones y autobuses Pegaso y recientemente vendida a Iveco, filial del grupo italiano Fiat, tras el frustrado intento de venta a Daimler MAN. El largo proceso de venta supuso para Enasa la pérdida continuada de cuota de mercado y un grave deterioro de su imagen. Tampoco Iberia, Ensidesa e Inespal podrán aportar los niveles de beneficios de otros años.

El principal soporte del grupo del grupo lo sigue siendo el grupo eléctrico Endesa, cuyas empresas superarán este año los 100.000 millones de beneficios, según las previsiones con que se cuenta en estas fechas.

Reorganización

El relevo al frente del organismo público no supondrá demasiadas variaciones en la política que ha trazado desde la llegada del partido socialista al Gobiern o Salas Collantes, de hecho, ha participado activamente en esa tarea desde que en 1983 fue nombrado director financiero. En la actualidad ocupaba el cargo de director general de Desarrollo Corporativo, puesto para el que se baraja a Pedro Sagüés, presidente de Infoleasing, una empresa que hace de brazo ejecutor de todas las actuaciones financieras del instituto y, por tanto, muy ligada a Salas Collantes.El nuevo presidente, que tomará posesión oficial del cargo mañana sábado, apenas hizo declaraciones, aunque reconoció que "la actual situación puede afectar a las empresas del grupo". Sobre las acciones del Instituto señaló que "es pronto para emitir una opinión, los problemas actuales no nos permiten concebir ningún plan concreto". A pesar de ello, Salas tendrá que continuar con el proceso de saneamiento de varias empresas.

También deberá abordar una reorganización en la cúpula del Instituto, que en los últimos meses ha sufrido varias bajas después de varios meses. Además de su sustituto necesita cubrir la Dirección General II, que dejó Ángel García Altozano, y la secretaría del Consejo, que deja José María Pérez Tremps, que se incorpora a Ferrovial.