Desastroso final del Barcelona en la cancha del Maccabi

ENVIADO ESPECIAL El Barcelona salió de su primer compromiso en la liguilla final de la Copa de Europa con la cara de tonto con que se queda uno cuando pierde en los últimos segundos un partido que tenía ganado. Excesiva precipitación en los ataques, errores en la selección de tiro y un arbitraje tan parcial como es costumbre en esta competición impidieron que el Barça ganase en la pista del Maccabi cuando lo tenía todo a su favor. Al final, con Audi Norris en el hospital a causa de una caída en la que se lastimó la cadera, el vestuario azulgrana se asemejaba al Muro de las Lamentaciones que el equipo visitó el pasado miércoles, en Jerusalén, en una escapada turística. El entrenador Aito, que colocó un papel en el Muro en el que presumiblemente escribió sus deseos, no vio recompensada su gran ilusión.

Al Barcelona le faltó serenidad en los 2.35 últimos minutos. Entró en ellos con una ventaja de 100- 107 y terminó con un parcial negativo de 8-0. En ese intervalo negro, Norris falló dos lanzamientos; Ferrán cometió una personal en ataque digna de un júnior, Epi no acertó a frenar una entrada del listísimo Berkowitz que acabó con personal de Norris; Solozábal hizo su quinta personal en una entrada alocada a canasta, y, finalmente, los árbitros cumplieron la tradición casera al perder el silbato en dos faltas a Norris y Sibilio en los últimos segundos. Total, 2.35 minutos para el desastre.

Esos minutos finales deslucieron el excelente trabajo del Barcelona en su primer compromiso serio de la temporada.

Derrota del Tracer

Los otros resultados fueron lo siguientes: Saturn Colonia (RFA), 102; Tracer Milán (ltalia), actual campeón, 78. Partizán Belgrado (Yugoslavia), 101 Nashua Den Bosch (Holanda), 94. Aris Salónica (Grecia), 92; Orthez (Francia), 86.