Argentina-Uruguay, partido estrella de las semifinales
El Argentina-Uruguay a disputar hoy en Buenos Aires es el partido estrella de las semifinales, e incluso de todo lo que va de campeonato. Chile y Colombia disputaron esta madrugada la otra semifinal. Los dos partidos han despertado un interés muy superior a todos los celebrados hasta ahora. La afición argentina sólo pide una cosa: que Bilardo se apee de su permanente idea de mantener a Alfaro en la alineación titular y ponga en su lugar a Caniggia, que por momentos se está convirtiendo en un gran ídolo.Argentina y Uruguay mantienen una rivalidad que no tiene parangón con ninguna otra entre equipos de selecciones nacionales. En total han disputado 158 partidos y el historial de incidentes es larguísimo. Argentina tiene ventaja en el historial, porque lleva 70 victorias por 40 empates y 48 triunfos uruguayos. Además, ha marcado 247 goles por 186 de los uruguayos. Pero Uruguay ha obtenido quizá los triunfos más rotundos en los choques entre ambos. Ganó la final de los Juegos Olímpicos de 1928 -por entonces equivalentes a la Copa del Mundo- por 2-1 en Amsterdam. Dos años más tarde ganó también la final del primer mundo, por 4-2. Y en 1967 también le quitó a Argentina otra final, la del campeonato suramericano.
En los últimos años, sin embargo, le ha ido mejor a Argentina. En 1975 quebró una racha de 35 años sin ganar en Montevideo. Con dos goles de Valdano, Argentina ganó por 3-2 en los comienzos de la etapa Menotti.
50 años sin ganar
En el último Mundial Argentina eliminó a Uruguay, gracias a una corta victoria por 1-0. Por otra parte, los uruguayos llevan 50 años sin ganar en Buenos Aires.
El partido tiene unas vísperas intensas y se recuerda todo el historial de conflictos, incluso la anécdota de que Carlos Gardel tuvo que visitar la concentración de las dos selecciones en vísperas de la final de 1930, como embajador de paz.
Uruguay presenta un equipo distinto al del Mundial, época en la que estaba al mando de un discutidísimo seleccionador, Omar Borrás, ya apartado. Tiene una delantera que impone respeto, con Alzamendi, Francescoli y el zaragocista Rubén Sosa. Pero ha tenido poca actividad antes del torneo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
