El Banco de Crédito Industrial dobló sus beneficios brutos durante 1985

El Banco de Crédite, Industrial (BCI) registró en 1985 un beneficio bruto de 20.935 millones de pesetas, doblando casi los 10.615 millones alcanzados en el ejercio anterior. El BCI superó el año pasado su particular Rubicón: una nave que parecía a punto de hundirse a causa, precisamente, de la cartera naval heredada del extinto Banco de Crédito a la Construcción, ha salido de nuevo a flote y navega viento en popa de la mano del presidente Rafael Suñol y su equipo.Claro que las especiales condiciones meteorológicas, determinadas por la aplicación del nuevo esquema contable de las operaciones de reconversión y la reducción del coste de los fondos destinados al banco por el Instituto de Crédito Oficial (ICO), para que el BCI remontara el vuelo, han tenido mucho que ver con la nueva bonanza. En efecto, los costes financieros del banco, gracias a esa ayuda, fueron en 1985 de 42.951 millones de pesetas, frente a los 48.278 millones del ejercicio anterior. Descontadas esas ayudas, tales costes hubieran sido de 52.293 millones de pesetas.

A causa del bajísimo coste de transformación del BCI -del 0,53%-, el margen neto del pasado ejercicio fue de 18.005 millones de pesetas, que hubieran sido de 8.663 millones de no haber contado con la mencionada ayuda del ICO. En suma, el Banco de Crédito Industrial ha podido dedicar, a provisiones y amortizaciones unos hermosos 20.935 millones de pesetas.

Rafael Suñol destacó ayer los aspectos descollantes del pasado ejercicio. Así, el banco puso más de 130.000 millones de pesetas a disposición de las empresas en sectores de reconversión. Se profundizó el saneamiento de la cartera naval, a lo que se han dedicado más de 26.000 millones de pesetas. Se produjo la integración del Crédito Social Pesquero, una línea de actividad ascendente que el pasado año destinó más de 16.000 millones de pesetas para la construcción de buques pesqueros. El BCI se consolidó como banco de inversiones de la pequeña y mediana empresa con más de 18.000 millones de pesetas concedidos a PYMES. Y, finalmente, el banco contribuyó de manera destacada a la financiación del proceso reindustrializador.