Miguel Muñoz, preocupado porque algunos de sus posibles titulares son suplentes en sus equipos

Las selecciones que ostentan los subcampeonatos europeos en la categoría A y en la sub-21 protagonizaron ayer, en el estadio Santiago Bernabéu, de Madrid, la apertura de la nueva temporada futbolística internacional. Pero se trató de una apertura distinta a la que hubiera deseado su máximo responsable, Miguel Muñoz. Ambas tuvieron que conformarse con un partidillo de entrenamiento cuando lo que Muñoz quería para la absoluta era un encuentro amistoso, serio, contra la finlandesa, el cual habría servido para preparar mejor la contienda con la galesa, el próximo día 17, en Sevilla, valedera para la fase previa del Campeonato del Mundo de 1986. La reciente huelga de los jugadores profesionales lo abortó. Muñoz se tropieza, además, con la inconveniencia de que varios de sus posibles titulares han comenzado la Liga como suplentes en sus clubes.

La cita mundial con México-86 empieza para España con su partido del 17 de octubre con País de Gales. Escocia e Islandia son los restantes componentes de un grupo cuyo triunfador se clasificará directamente para aquélla, en tanto que al segundo aún le quedará la opción de eliminarse con uno de los ganadores de la zona asiática y oceánica.País de Gales acudirá a Sevilla con la obsesión de puntuar. Su sorprendente derrota inicial en Islandia le ha puesto contra las cuerdas. Para Muñoz y su brazo derecho, Vicente Miera, su traspié constituye un arma de doble filo. Favorece en el sentido de que ha perdido en un terreno asequible en principio. Y perjudica porque ahora necesita resarcirse con urgencia. El tándem de técnicos españoles, al que desde ayer se unió con carácter oficial Manuel Delgado Meco, el preparador físico que sustituye a Carlos Álvarez del Villar, se muestra preocupado. Se pretendía un encuentro amistoso, serio, ante Finlandia, para ir preparando al conjunto. Pero el paro lo impidió. "Ha habido que consolarse con un partidillo de entrenamiento, que no es igual porque, en el segundo tiempo, los jugadores ya sólo corrían hacia adelante, olvidándose de retroceder con rapidez", confesaba, a su término, Muñoz. Sucede, además, que algunos de sus posibles titulares no lo son, hoy por hoy, en sus cuadros. "No pueden estar en la forma debida si no actúan con regularidad. Entonces, habría que pensar en sustituirlos", advirtió el seleccionador nacional.

Casi todos los que son

Arkonada; Señor, Maceda, Goikoetxea, Camacho; Víctor, Gallego, Gordillo; Carrasco -con un ligero esguince en un tobillo-, Sarabia y Rincón integraron su cuadro inicial. Podría convenirse en que estaban en él casi todos los que son. La ausencia más significativa respecto al último campeonato europeo fue la de Santillana, que se entrevistó previamente al ensayo con Muñoz y Miera y les manifestó que confía en recuperarse de su lesión a tiempo de contar para el partido con País de Gales. Luis Suárez, el encargado del cuadro sub-21, alineó a Elduayen; Sanchis, Patxi Salinas, Serna, Martín; Elguezábal, Eusebio, Beguiristáin; Eloy, Ramón y Martín Vázquez. Como suele ocurrir en lances de esta clase, éstos aparentaron correr más que aquéllos, aunque el único gol del primer tiempo lo consiguió, cómo no, Maceda, precisamente en la única ocasión en que se fue hacia arriba, tras combinar con Rincón y Víctor. En cualquier caso, el ala compuesta por Beguiristáin y Martín Vázquez creó muchas inquietudes a Señor.En el segundo acto, que duró sólo 33 minutos, por 40 el primero, entraron en liza los demás convocados. Zubizarreta; Urkiaga, Maceda, Salva, Goikoetxea; Gallego, Francisco, Julio Alberto; Butragueño, Sarabia y Rincón se opusieron a Ablanedo; Sanchis, Patxi Salinas, Serna, Andrinúa; Fernando, Eusebio, Beguiristáin; Francis, Ramón y Martín Vázquez. Butragueño, oportuno, se revolvió para rematar un cabezazo de Rincón a la salida de un cómer lanzado por Julio Alberto y logró el segundo tanto de los A. Ramón acortó distancias. Y el propio Butragueño estableció el 3-1 definitivo al ejecutar, a petición de su público, un penalti y hacerse de nuevo con el balón, tras rechazarlo Ablanedo, para tirar ya de modo inapelable.

"Unos han jugado mejor que otros, pero el tono general ha sido bueno", contemporizó Muñoz. Pero su ceño se frunció al abordar el hecho de que cuatro de sus pupilos de ayer no son fijos en sus clubes. Se refería a Butragueño, Gallego, Salva y Sarabia.

De ellos, las situaciones más enconadas son las del barcelonista Salva, que expuso que "es lógico que Muñoz cuente conmigo porque conoce mi juego; en cambio, Venables apenas me ha visto", y el madridista Gallego, que ya ha conversado a fondo con Amancio sobre sus circunstancias y que reconoció hallarse "en un momento difícil porque sólo salgo al campo a ratos y sabiendo que cada vez que toco el balón arriesgo mi puesto".