Alain Prost y Niki Lauda tendrán hoy menos ventajas

El circuito urbano de Montecarlo será escenario hoy domingo del Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1, sexta prueba del calendario del mundial de esta temporada. El aplastante dominio inicial del motor Porsche, que impulsa los McLaren del francés Alain Prost y del austriaco Niki Lauda, no debería mantenerse en un trazado tan lento y sinuoso como el monegasco, donde la mayor elasticidad de los Lotus, Renault y Ferrari debería servir para imponerse.

Mientras la limitación del consumo de gasolina perderá hoy la trascendencia que ha tenido hasta ahora, ganarán importancia los más mínimos fallos de conducción, al estar la pista limitada por el bordillo de las calles.De las cinco carreras disputadas hasta el presente, sólo el italiano Alboreto (Ferrari) ha podido arrebatarles un triunfo a los pilotos de la escudería McLaren. El francés Alain Prost -líder provisional del campeonato- y el austriaco Niki Lauda -segundo clasificado en el mundial-, se repartieron a partes iguales las victorias en las cuatro restantes. Sin embargo, en el trazado urbano de Montecarlo, el potente motor Porsche no contará con tantas ventajas para imponerse.

Será la elasticidad en la respuesta, y, sobre todo, la fiabilidad de la transmisión, las piezas claves de la victoria. En las curvas tan cerradas y tan lentas como las del más clásico circuito del mundo, los motores caen de vueltas irremisiblemente. Es fundamental, por tanto, que los motores tengan una respuesta suficientemente potente incluso a bajo régimen para poder recuperarse.

La transmisión es, asimismo, elemento decisivo. Los cambios de marchas son constantes. Al lógico esfuerzo, debido a esa sobreutilización, es preciso añadir los constantes cambios de asfalto, las desigualdades del piso -que no es una pista permanente, sino las calles de una ciudad- y los continuos desniveles de subidas y bajadas. Demasiadas cargas para unas transmisiones no acostumbradas a ese tipo de esfuerzo, y que suelen ser el motivo de la mayoría de los abandonos en el Gran Premio de Mónaco.

A todo ello debe sumarse la exigencia de una conducción casi milimétrica por parte de los pilotos. Lenta, y por lo tanto menos peligrosa, pero que no admite ni un sólo fallo. El menor contacto con un bordillo supone el abandono, y prácticamente los 3.312 metros del perímetro del trazado están limitados por bordillo. Eso no ocurre en los circuitos permanentes, en los que el margen de error es, así, muy superior.

Prost, la sorpresa

En los últimos ensayos, Alain Prost consiguió dar la sorpresa al obtener, en un circuto tan adverso para su vehículo, el mejor tiempo jamás realizado en Montecarlo (1.22.66), a una media de 144,251 kilómetros por hora, aunque el coche de Prost alcanzó la velocidad punta de 271,8 Km/h a la salida del túnel. Prost dio a su escudería el mejor puesto de salida, un lugar que no obtenía McLaren desde el 2 de octubre de 1977, cuando el británico James Hunt realizó el mejor tiempo antes de ganar en Estados Unidos.De esta forma Prost saldrá en primera línea, junto a Mansell (Renault); en segunda estarán Arnoux (Ferrari) y Alboreto (Ferrari); en tercera, Warwick (Renault) y Tambay (Renault); la cuarta línea es para Andrea de Cesaris (Ligier Renault) y Niki Lauda (McLaren); la quinta para Nelson Piquet (Brabham) y Keke Rosberg (Williams Honda); sexta para Elio de Angelis (Lotus Renault) y Manfred Winkelhock (BMW).