_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Las masas gastronómicas

No te puedes fiar ni de tu padre Paul Bocuse, profeta de la nouvelle cuisine, ha renegado de su invento y reivindica la cocina tradicional. Tardarán las cosas en recuperar el sitio de las cosas, porque, por ejemplo, la nueva cocina aún está en plena fase de adoctrinamiento mundial.No se habla de otra cosa. Los en otro tiempo honrados padres de familia que ejercían de patriarcas desde su sillón privilegiado andan entre cazuelas y caldos cortos o tuétanos en busca de la piedra filosofal de Ia costilla de buey con tuétano y con salsa de vino", y no hay ex secretario general de partido marxista-leninista que no haya intentado guisar un faisán relleno de foie-gras, eso sí, a la Souvarov Hasta los patados, que guisan lo que pueden entre ocios y amarguras, han descubierto que el chino afin a los sofritos y convierte las patatas viudas de posguerra en un comistrajo de buen ver. La categoría de gourmet se inscribe en las tarjetas de visita y en las biografías para diccionarios enciclopédicos y hasta las masas se intercalan recetas como si fuera esta noche la última vez. Esta hermosa vulgarización del saber culinario se origina en el hermético saber de los eruditos, luego apropiado por los snobs, divulgado por los publicistas e industriales y asumido por miles y miles de s eres humanos desencantados de la vida y de la historia. Brillat Savarin fin de milenio, Xavier Domingo le puso eslogan al asunto ... : "... cuando sólo nos queda la comida", y se lo han tomado al pie de la letra hasta los inspectores de Hacienda, sólo corrompibles a cambio de la fórmula de las berenjenas con langostinos. Tan masivo es el orgasmo, que los esnobs se han mosqueado y andan por ahí reivindicando el huevo duro con granos de sésamo, las acelgas y otros flagelos del paladar, hasta que descubran la hamburguesa y la pongan de moda como el no va más de la posmodernidad. Mientras tanto, las masas buscan vinagres al ajo, al hinojo, al limón limonero, en una rebelión gastronómica que es un escandaloso destape del paladar. Los esnobs se purgan, los industriales de la comida se frotan las manos y alguien prepara, a estas horas, un suculento golpe de Estado.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_