La cuarta etapa fue un ensayo para la próxima lucha entre los equipos españoles
LUIS GÓMEZ ENVIADO ESPECIAL, Noel Dejonckheere, por segunda vez, es ganador de etapa. Ayer volvió a imponerse en ese duelo particular y eléctrico que mantienen cuatro -corredores -De Vlaeminck, Van Calster, Lieckens, el ganador de la víspera en Elche, y él-, los mejores especialistas en los últimos metros. La carrera rompió todo pronóstico porque hubo escapada hasta un kilómetro de la llegada. Todo parece indicar que los directores de equipo, los españoles, han roto las hostilidades. A partir de hoy se producirán las acusaciones mutuas. La cuarta etapa fue un ensayo, con casi todo el decorado instalado, de lo que va a ser la conflagración general que se anuncia entre los conjuntos nacionales.
Cuando aún el pelotón no se había repuesto del todo de las escapadas tempranas e inmaduras cuando todos los directores se hartan de intentar engañarse anunciando que debe existir paz en estas primeras etapas, a la primera ocasión en que apareció por el horizonte un puerto de segunda categoría -alto de La Carrasqueta, 1.020 metros-, se desató un ataque feroz e indiscriminado que fructificó en una escapada que duró -en su último coletazo, con el belga Edmons- hasta casi la línea de meta. Ayer hubo 160 kilómetros de escapada, lo que quiere decir que esta Vuelta anuncia una fuerte guerra de nervios. Algunos jefes de fila y otros destacados estuvieron en las primeras posiciones. Unos se reservaron y otros no tanto, pero los españoles ' llevaron todo el peso de la carrera. Moser se limitó a descansar en el pelotón mientras sus más directos rivales resolvían el conflicto. Por tanto, sigue de líder.La carrera de ayer anuncia cómo están los ánimos, cómo los españoles buscan una estrategia de equipo. Zor y Teka atacaron ayer, Kelme rozó cierta ambigüedad y Reynolds no quiso saber nada de esta batalla temprana. Zor y Teka se unieron en el primer ataque, pero Zor y Reynolds lucharon al final para que Edmons (Teka) no llegara a la meta ni como líder ni como vencedor. Teka perdió la batalla, aunque su sprinter ganara la etapa, hecho que hubiera podido suceder igual con una llegada en grupo y sin tanta hostilidad.
Todos hierven de ambición por ganar esta Vuelta. Y, por tanto, pocos esperan el momento propicio e intentan desesperados golpes de mano, pensando más en la suerte que en otra cosa. Después de un par de escaramuzas a cinco kilómetros de la salida, con López Cerrón como protagonista, Yáñez atacaba al comienzo del primer puerto. Dio la sensación de que se intentaba sólo poner a prueba al resto, Pero, tras Yáñez y cuando se llevaban 36 kilómetros de carrera, saltaron 11, corredores, entre los que estaban Edmons, Patrocinio Jiménez y Corredor (Teka), Gorospe (Reynolds), Rupérez y Alberto Fernández'(Zor), Yáñez (Orbea) y Belda (Kelme). No era vara tomárselo a broma.
Intento de boicoteo en Salou
Algunos sectores de la población de Salou intentan boicotear la llegada de la etapa de hoy, Valencia-Salou, según manifestó a Europa Press el presidente de la junta de segregación de Salou Francesc Germa. Germa, en nombre de la junta, declaró que dicha entidad es ajena al hecho y que incluso ha informado a las autoridades y policía de los rumores que circulan en la población sobre tal intento. Como se sabe, la población de Salou, una de las más importantes zonas turísticas del Mediterráneo, quiere segregarse de la población de Vilaseca, de cuyo municipio forma parte. Al parecer, algunos quisieran hacer uso de tal medida de fuerza y propaganda para apoyar dicha segregación.
Clasificaciones:
Etapa: 1, Dejonckhecre (Teka), 4.56.23; 2, De Viaeminck (Gis), m. L; 3, Van Calster (Tongo)m. t.
General: 1, Moser (Gis), 24.17.20; 2, Ruiz-Cabestany (Orbea), a 9 segundos; 3, Blanco (Teka), a 11.
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