El recuerdo del último 'derby' pesa sobre el Madrid-Atlético

Madrid y Atlético se enfrentan esta noche, en el Bernabéu, en el primero de los partidos de su eliminatoria copera de cuartos de final, con el recuerdo aún reciente de lo ocurrido hace unas fechas en el Manzanares, aunque de uno y otro lado se afirme oficialmente que todo está olvidado. Hay ambiente, pese a los precios caros. El cargo en taquilla es de unos cincuenta millones de pesetas, lo que podría constituir récord. Boskov repite el equipo que ganó al Zaragoza, y García Traid mantendrá hasta hoy la duda de Marcos. Ruiz está también algo tocado, aunque se confía en recuperarle.

Los entrenadores de ambos equipos hubiesen preferido no enfrentarse en esta eliminatoria, no sólo por las dificultades que para uno y otro supone siempre superar al eterno rival, sino también por los incidentes ocurridos hace unas fechas en el último derby, tras la pésima actuación del árbitro vizcaíno Urízar Azpitarte. Quien sí soñaba con esta confrontación era el presidente del club rojiblanco, Alfonso Cabeza, que sigue de vacaciones en Lanzarote, por aquello de la fuerte taquilla que supondrá el choque de vuelta y por la posibilidad de la revancha deportiva. En la propia plantilla del Atlético ha existido cierta disparidad de criterios en torno al tema. Así, mientras a algunos, como Arteche, le ha encantado el resultado del sorteo por la apuntada revancha deportiva, otros, como Rubén Cano, optaban por que correspondiese un rival más asequible, como Coruña o Rayo. A Boskov también le gustaba el Coruña como rival.

Deportivamente la eliminatoria llega en buen momento para ambos equipos. El Madrid se encuentra pletórico, con fuerza más que buen juego, pero líder del torneo de Liga y con confianza, sobre todo, en el poderío que representa contar en un mismo equipo con Stielike y Camacho, principales artífices de la situación madridista, junto con el buen nivel que exhibe Gallego en cada partido, y con la recuperación del olfato realizador y las intermitentes genialidades de Juanito. El Atlético, que pareció caer en picado tras el polémico partido del Manzanares frente al Madrid, ha recuperado la fe en sí mismo al eliminar de la competición al Barcelona, confirmando su recuperación al ganar en Las Palmas con el refuerzo moral en sus jugadores, que han visto dinero en metálico en las últimas fechas.

Mientras Boskov parece decidido a repetir la formación que ganó el pasado domingo al Zaragoza, aunque especula con la posible reaparición de Benito, en lugar de Angel, y duda entre alinear inicialmente a Ito o Pineda, García Traid mantendrá hasta hoy otras dos dudas, que en la práctica pueden quedar reducidas a las molestias que sufre Marcos a la altura del peroné, tras la lesión que sufrió precisamente en el que será su escenario deportivo la próxima temporada, el Camp Nou, y que ya le impidió actuar en Las Palmas. Hoy habrá prueba definitiva para él, al igual que para Ruiz, lastimado en el muslo de su pierna izquierda. Marian o Pedro Pablo cubrirían la posible ausencia de Marcos, y lo que parece seguro es que esta vez no habrá duelo en el centro del campo entre Julio Alberto y Stielike. El rojiblanco ocupará su habitual puesto de lateral, al no poder jugar el joven Clemente, por haber intervenido en la Copa con el filial atlético.

Los problemas han surgido, tal como se suponía, a la hora de elegir árbitro para los dos partidos de los rivales madrileños, dada la actual situación del Atlético con los colegiados y las suspicacias que se crean en torno al Madrid. Esta vez quedaban pocos donde elegir, si se tiene en cuenta que el Atlético tiene recusados a tres (Alvarez Margüenda, Pes Pérez y Guruceta), ha puesto esta temporada cuatro ceros (Urízar, Borrás, De Burgos y Enríquez), y hay otros cinco árbitros castellanos que teóricamente no pueden dirigir a ninguno de los dos equipos, entre ellos el internacional Soriano Aladrén. Por otras razones tampoco eran aconsejables árbitros como Fandos, Merino, Franco o Urío, así que quedaba poco donde elegir. Al final, el de siempre, García Carrión, con opción para Sánchez Arminio en el choque de vuelta.

Por lo demás, el Atlético envió ayer un télex a la Federación so licitando información en torno a la supuesta prima que un determinado ex promotor de boxeo tenía previsto conceder a los jugadores por la eliminación del Barcelona, 250.000 pesetas a cada futbolista, por si se incurría en alguna falta al Reglamento. El Atlético asegura que está al margen, y en la Federación se iba a consultar el tema, aunque la impresión era la de que toda compensación económica debe seguir las vías de la directiva del club.