Comienza la temporada de maratones populares

En febrero comienza la temporada de maratones populares en España con la celebración, el día 28, de la segunda edición de Valencia. El 14 de marzo será la maratón de Barcelona, y el 2 de mayo, la de Madrid. Esta es la que reúne un mayor número de participantes y la preferida para corredores de otras provincias. Los tres meses que aún restan para su celebración suponen un margen más que suficiente para que la preparen las personas con cierto hábito deportivo y para que los que hayan tenido ya alguna experiencia en estas pruebas mejoren sus marcas.

La organización de la Maratón Popular de Madrid (Mapoma) tuvo una profunda crisis al término del pasado año. Francisco Perela, tras dimitir en la presidencia, volvió al cargo, con lo que la posibilidad de que la carrera presentara este año importantes innovaciones quedó truncada. El presidente no está dispuesto a que ninguna firma comercial se haga con la carrera y volverá a contar con el único esfuerzo de su equipo, ligeramente renovado para esta ocasión.La maratón se celebrará el 2 de mayo, antes que ningún otro año, para evitar que el calor influya negativamente en la carrera. El recorrido será el mismo de la última edición, pese a que se considera de cierta dureza. También se mantiene el precio de la inscripción, es decir, cuatrocientas pesetas. El plazo para la adjudicación de dorsales se abrirá el 22 de febrero y se cerrará el 15 de abril, sin la posibilidad de prorrogarse para dar tiempo a la mecanización y el procesamiento de todas las inscripciones.

Salir en una maratón a ganar o a la búsqueda de un tiempo por debajo de las tres horas obliga a realizar entrenamientos diarios durante todo el año. Pero este no es el objetivo de las maratones populares, que pretenden una participación masiva, no competitiva nada más que para la elite participante. De lo que se trata es de mejorar tiempos anteriores o de fijar uno inicial, por malo que parezca, para irlo rebajando en años sucesivos. Esto denotará una mejora física en el individuo y, cada vez, una mayor práctica deportiva, hasta hacerse habitual. También se trata de demostrar en la maratón que el individuo está capacitado para los más grandes esfuerzos. Y los 42,195 kilómetros son todo un reto cargado de historia legendaria, afrontado y superado hoy día aproximadamente, por medio millón de personas en el mundo cada año, cifra que va en aumento. De ahí que la maratón, pese a ser la prueba más larga y dura, sea la que tiene mayor poder de convocatoria a nivel popular.

Programas de entrenamiento

Los tres meses que faltan para la maratón de Madrid son suficientes para realizar un plan de entrenamiento que permita afrontar los 42,195 kilómetros del recorrido con absoluta garantía de llegar a la meta. Depende de la intensidad de los entrenamientos y de las propias características de cada individuo el llegar antes a la meta. Los planes que a continuación se exponen son indicados para aquellos corredores que cifren sus esperanzas en hacer la maratón entre las tres horas y las tres horas y media, lo que supone ir a un ritmo mínimo de cinco minutos por kilómetro durante todo el recorrido. Para los que vayan a correrla por vez primera estará a su alcance bajar de cuatro horas.Los entrenamientos tienen la finalidad de mejorar la resistencia, pues hace falta tener mucho fondo para correr sin parar, aunque sea a ritmo lento, más de 42 kilómetros. La velocidad, que se pierde con los años, no es necesario mejorarla, siempre que no se tenga como objetivo el hacer grandes marcas. Para el nivel medio es más rentable y positivo trabajar la resistencia antes que la velocidad. Por tanto, lo indicado es hacer kilómetros, a un ritmo cómodo si se quiere, en campo o carretera y olvidarse de hacer series en pista, reservadas para los que ya están al límite de sus posibilidades físicas y no tienen más solución que trabajar la velocidad para mejorar tiempos.

Hay un plan moderado de tres meses, indicado para aquellas personas que nunca hayan realizado una maratón. Hay que completar tres ciclos, uno por mes, de cuatro semanas cada uno, al término de los cuales conviene hacer un control de distancia. El plan queda completado con una semana final de recuperación y descanso activo. Se comienza con cuatro entrenamientos a la semanas de treinta minutos cada una en la segunda semana se aumenta el tiempo a cuarenta minutos; en la tercera, a cincuenta, y en la cuarta, a una hora, pero en ésta sólo durante tres días, pues en el cuarto se realiza el primer control en distancia, que será sobre quince kilómetros. Los entrenamientos correspondientes al segundo ciclo tendrán una hora de duración; cinco días en la primera y segunda semanas, cuatro en la tercera y tres en la cuarta semana, en la que también se hará un control de distancia, esta vez sobre veinte kilómetros. En la primera y cuarta semanas del último ciclo hay, que realizar cuatro entrenamientos de una hora; en la segunda y tercera, dos de una hora y otros dos de diez kilómetros, además, de un control sobre veinticinco kilómetros. Este tercer ciclo debe finalizar una semana antes de la maratón, para dedicarla a efectuar tres o cuatro entrenamientos muy suaves, de unos 45 minutos cada uno, y descansar las últimas 48 horas antes de la carrera.

Puede realizarse también un plan intensivo de entrenamiento, especificado en cuadro aparte, que permite afrontar la maratón en mejor forma física. Requiere mayor dedicación y un hábito deportivo en el individuo, ya que su seguimiento precisa de una adecuada base física y de un endurecimiento mental para soportar los entrenamientos diarios.

El ritmo a aplicar durante los entrenamientos no tiene por qué ser forzado. Las agujetas tampoco deben ser síntoma para posponer el entrenamiento. La alimentación, hasta la última semana de la maratón, tiene que ser la habitual. Por lo que respecta a la indumentaria, de interés sólo son, de momento, las zapatillas, ya que, de ser nuevas, hay que ir adaptándolas al pie; hay muchos modelos específicos para las grandes distancias, que van desde las 5.000 hasta las 10.000 pesetas, y cuya larga duración está garantizada.

Otras pruebas

Para la maratón de Valencia, que será el 28 de febrero, ya está abierto el plazo de inscripción, que cuesta trescientas pesetas, y puede efectuarse en la sede del club organizador, el Correcaminos, en la calle de Rafael Cisternas, 4, en Valencia. El plazo finalizará el 23 de febrero. Presentará como novedad que todos los dorsales de los corredores serán controlados tanto en la salida como en la llegada, al estilo de Nueva York, para evitar los corredores que no hacen entero el recorrido.Por lo que respecta a la maratón de Barcelona, se celebrará el 14 de marzo y las inscripciones costarán quinientas pesetas. Podrán efectuarse en la sede de la Comisión Maratón Catalunya, en la calle de Junqueras, 16, en Barcelona.