_
_
_
_
Entrevista:

Rojas Marcos: "Personalmente no me siento muy afectado por los resultados del congreso"

Al cabo de varias semanas de silencio voluntario, el secretario general del Partido Socialista de Andalucía (PSA), Alejandro Rojas Marcos, ha concedido unas declaraciones a EL PAIS en las que se manifiesta satisfecho de los resultados del congreso extraordinario, asume errores de su actuación anterior y califica de peligrosa y disgregadora la postura de los disidentes del PSA.

Pregunta. Usted ha pasado en pocos meses de ser el líder indiscutible del Partido Socialista de Andalucía a ganar por los pelos un congreso en el que se ha registrado una fuerte oposición a su figura política. ¿Cómo asume este hecho desde un punto de vista personal?Respuesta. Para entender cuál es mi posición personal hay que remontarse a los orígenes de esta crisis, que se plantea el pasado verano por un sector de la dirección del partido. Es de destacar que este sector no disiente en cuestiones ideológicas ni estratégicas que son asumidas unánimemente por toda la dirección, y que tampoco se cuestiona mi continuidad como primer secretario del PSA. En concreto, la propuesta que ellos me hacen es que yo siga como primer secretario, pero sustituyendo a los compañeros que ocupan los puestos clave en el comité nacional, tales como Miguel Angel Arredonda, Luis Uruñuela, Alfonso Macua y otros. Sólo cuando yo me negué a aceptar esta propuesta se lanza la alternativa de Ladislao Lara. Por eso es normal que personalmente no me sienta muy afectado repito que mi cargo no estaba en discusión en un primer momento.

P. Sin embargo, es evidente que un 40% de los delegados del congreso han estado en contra de la candidatura de Rojas Marcos, y no creo que eso pueda ser muy satisfactorio para usted...

R. Yo veo muy positivos los resultados del congreso. En primer lugar, por su misma celebración. No es normal que los partidos políticos accedan a resolver sus problemas internos en un congreso extraordinario. Hemos tenido mucho valor en el Partido Socialista de Andalucía para dejar aparcadas las medidas disciplinarias e ir directamente a la confrontación. ¿Por qué ese 40% de votos en contra? Porque la dirección del partido había cometido dos graves errores. Uno que no supimos explicar bien a la opinión pública nuestro acuerdo con el Gobierno para el desbloqueo de la autonomía andaluza, debido a la bajísima popularidad del Gobierno en ese momento y a la agresión virulenta, a base de calumnias e insultos, del bloque PSOE-PCE, irritado por nuestra iniciativa. Tengo que decir otra vez que valoramos positivamente aquel pacto, que fue cumplido escrupulosamente y asumido al final por socialistas y comunistas. Sin el pacto la autonomía andaluza seguiría bloqueada. También tengo que decir que el acuerdo final fue el mismo que habíamos juscrito antes: la autonomía del artículo 151 a través de la puerta del 144, aunque no se citara este último para dar una satisfacción formal al PSOE.

P. Ese fue el primer error. ¿Y el segundo?

R. El otro error es que la dirección, obsesionada por ganar poder institucional y mantener la supervivencia del partido, se había desconectado de la base y esto había creado serios descontentos. Vamos a corregir estos errores. En resumen: el 60% de los votos del congreso expresa la confianza en la que venía siendo la dirección del PSA, y el 40%, el castigo por los errores cometidos.

P. La destitución de Ladislao Lara como viceconsejero de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía ha sido vista como él principio de una depuración de los elementos críticos del PSA de cara a un congreso ordinario más «normal».

R. A Ladislao Lara se le ofreció la oportunidad de que dimitiera, y eso hubiera sido lo más lógico; pero él se negó. Ahora bien, esto no supone ningún intento por parte del nuevo comité de liquidar a los disidentes. Si ha de tomarse alguna medida sancionadora contra estos ex dirigentes corresponde decirlo a la comisión, de disciplina de la permanente. Yo me quiero mantener absolutamente al margen de este asunto. Y no es una posición de ahora. Ya en su momento el comité nacional envió a la permanente un informe sobre las actividades del sector disidente, que eran inadmisibles porque no respetaban los cauces del partido. Ellos mismos llamaban a su movimiento «la conspiración». Pero el comité nacional nopropuso ninguna medida concreta en su contra.

P. Sin embargo, de sus palabras se deduce que estos disidentes serían merecedores de sanción. ¿Qué haría Alejandro Rojas Marcos si fuese miembro de esa comisión de disciplina?

R. No puedo, entrar en ese tema. Es cierto que el comité nacional consideró estas actividades como dignas de ser sancionadas. En un partido democrático se puede y se debe admitir la discrepancia, pero las estructuras y cauces establecidos hay que respetarlos con todo rigor. Los derrotados el domingo habían aprovechado la situación del partido tras la moción de confianza para lanzar su alternativa, y el mitin de Granada fue su presentación pública. El comité estimó que estas actividades eran gravemente peligrosas, para la unidad del parlido, disgregadoras e inadmisibles. Se hacían al margen de los cauces normales, como ellos mismos advirtieron con toda nobleza.

P. Tal vez la solución definitiva de esta crisis estuviese en cambiar los estatutos del PSA y admitir en su seno la existencia de corrientes organizadas.

R. Es obvio que existen en el partido corrientes y divergencias, pero no conozco a ningún partido parlamentario que acepte tendencias organizadas en su interior, y nosotros no somos una excepción. Una corriente organizada es tanto como un partido dentro del partido. Yo no soy, desde luego, partidario de que se cambien los estatutos en este aspecto. Quiero decir también que estos siete compañeros son miembros muy cualificados del partido. Yo he trabajado con ellos con toda comodidad, y no puedo decir más que cosas buenas de los siete. El peligro que nosotros veíamos con su actuación es que existía el riesgo de convertir al PSA en un partido testimonial, situado en la órbita del PSOE de forma inevitable, por la propia dinámica que se había creado.

P. ¿No teme que la adopción de sanciones contra el sector crítico podría, en caso de producirse, provocar una fuga de militantes del partido?

P. Me extrañaría mucho que el PSA quede diezmado por este motivo. No creo que un error de la comisión de disciplina, por ser excesivamente blanda o excesivamente dura con estos ex dirigentes, supusiera el abandono del partido por parte de muchos de sus miembros. En todo caso, los que lo hiciesen no tendrían muy clara su vinculación al partido cuando la cuestionan por estos motivos.

P. ¿La crisis del PSA va a suponer cambios importantes en la estrategia futura del partido o en sus componentes ideológicos?

R. La estrategia del PSA continúa siendo plenamente válida y, repito, fue asumida por unanimidad por el comité nacional anterior. Se basa en la no alineación y una política de alianzas cambiante en función de los intereses del pueblo andaluz en cada momento. Con respecto a los ejes ideológicos, mantenemos los aprobados en los dos congresos anteriores, y que espero se ratifiquen en el tercero: el socialismo autogestionario y el nacionalismo de liberación. Estamos donde estábamos,

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_