El Barcelona, apurado finalista del Gamper

El Barcelona se clasificó apuradamente para la final del Trofeo Joan Gamper, tras crear innumerables ocasiortes de gol y fallar en los momentos clave de rematar la jugada. Consiguió marcar sus dos tantos de penalti. En la primera parte, el equipo azulgrana se mostró inconexo, inseguro e individualista, y sólo sacó a relucir la calidad de sus jugadores en ocasiones aisladas. Mejoró algo en la segunda. En líneas generales llegó a inquietar a su público, por su imprecisión, ante un Eindhoven que vino al Gamper a hacer su papel, pero sin hacer concesiones. El equipo holandés jugó un fútbol práctico y compacto.En el centro del campo se notó la ausencia de Asensi, sustituido por un Martínez correcto y hasta brillante durante los dos primeros tercios del partido, pero absolutamente desconcertado en los últimos minutos. Quini, en su debú, logró arrastrar aplausos en ciertos momentos, pero fracasó en su principal cometido cara a puerta y llegó a exasperar al público, al fallar un gol cantado tras una preciosa jugada de Krankl.

Este fue quizá el mejor del Barcelona y, desde luego, se mostró mucho más entusiasta que en su etapa anterior.

Alexanco no dio la sensación de seguridad y tranquilidad que debe tener en su puesto y que todo el mundo esperaba de él. Aunque puede llegar a formar un extraordinario tándem con Migueli cuando llegue a adaptarse a las particularidades de la zaga barcelonista. Amador no fue culpable en el gol encajado y agradó en general por su espectacularidad.

El Barcelona, en fin, puede que esté en la buena línea si Kubala acaba de encajar las magníficas piezas de que dispone.

En el otro partido, el Vasco da Gama brasileño se clasificó justamente para la final de hoy contra el equipo azulgrana, pues el River Plate argentino notó demasiado que casi se bajó del avión para jugar. Su conjunto pudo a las individualidades rivales y ganó por 3-2. Además, Merlo fue expulsado en el minuto 55 y hasta falló alguna vez el gran guardameta Fillol.