Jamón para el árbitro
Los árbitros, acostumbrados a recibir pedradas e insultos en cualquier parte, han sido objeto de un curioso desagravio en Málaga. La peña El Parral, de hinchas del equipo andaluz, tiene establecido un premio para el mejor en los partidos de casa: un jamón. El domingo, tras el Málaga-Real Sociedad, se decidió que el mejor había sido el árbitro canario Merino. Y para él fue el suculento y nutritivo regalo. No es habitual que el público tenga deferencias hacia los árbitros, y menos cuando el equipo de casa no ha sido capaz de ganar. Muy bien tuvo que hacerlo Merino para conseguir el premio.Los socios de la peña malacitana han dado muestras de buen humor y de deportividad. Sería bueno que cundiese el ejemplo y que los públicos, tan proclives a castigar al árbitro cuando ven motivo para ello, fueran también capaces de premiarlos como ha ocurrido en Málaga.
