Alan Jones saIdrá de nuevo en cabeza
Hoy, en el circuito de Watkins Glen, en Nueva York, se disputa el Gran Premio de Estados Unidos Este, última prueba de esta temporada del Campeonato del Mundo de Fórmula 1. El hecho de estar ya el título en poder del surafricano Jody Scheckter resta algo de interés a la carrera, aunque queda por dilucidarse el subcampeonato entre Villeneuve y Laffite.
LEWINEl sensacional final de temporada del australiano Alan Jones, unido al fantástico nivel alcanzado por el Williams que conduce, obligan a dar un pronóstico favorable para él de cara al triunfo. Triunfo que, de producirse, no le mejoraría en nada su posición, al haber ya sumado todos los puntos posibles en la segunda mitad del campeonato. Pero, al menos, serviría de reconocimiento de las cualidades de un piloto ignorado hasta hace bien poco. Cinco victorias en un solo año es una cifra difícilmente igualable, y nada parece indicar que la buena racha de Jones -que hasta este año sólo había obtenido una victoria en toda su vida- vaya a quebrarse en las primeras pruebas del año próximo.Por su parte, Villeneuve y Laffite lucharán por la conquista del subcampeonato. El primero de ellos, el pequeño canadiense, renunció al título tras su pinchazo en Holanda, cuando comandaba la carrera. En la carrera siguiente en Italia, su objetivo fue cubrir las espaldas de su compañero Scheckter, con el fin de asegurarle a éste el título. Ahora, cumplida su misión, Villeneuve intenta un subcampeonato más que probable.
Frente a él estará el francés Laffite, que tuvo un comienzo de temporada arrollador, venciendo en las dos primeras carreras con su nuevo Ligier, para oscurecerse más tarde y enmendar un poco la situación al final del año. Para lograr desplazar al segundo piloto de Ferrari, Laffite necesita imperiosamente la victoria, lo que no parece muy a su alcance, dada la situación actual.
El circuito de Walkins Glen, próximo a Nueva York, tiene 5.435 metros de longitud y un trazado un tanto extraño. De cualquier forma, el promedio en que se rueda, superior a doscientos kilómetros por hora, hace que esté incluido en el grupo de los rápidos. El récord de la pista está en poder del francés Jarier, quien lo estableció el pasado año cuando tuvo la oportunidad de pilotar el Lotus que había quedado vacante tras la trágica muerte de Peterson en Monza. El tiempo de 1-39-5, que en la pasada edición pareció sensacional y le valió a Jarier un contrato con Tyrrell después de un tiempo de ostracismo, quedará ampliamente mejorado en esta ocasión por una decena de pilotos en los entrenamientos oficiales.
Por otra parte, según informa la agencia Efe, la lluvia caída de forma incesante sobre el circuito durante toda la primera sesión de entrenamientos oficiales perturbó de forma notable éstos. Pocos pilotos optaron por salir a la pista a rodar, realizando todos ellos -salvo el canadiense Villeneuve- tiempos muy discretos.
Finalmente, en la segunda sesión, ya sobre suelo seco, Alan Jones consiguió ser otra vez el más rápido, por lo que saldrá en primer lugar de la parrilla. A su lado, sorprendentemente, estará el joven brasileño Nelson Piquet, hasta ahora segundo piloto de Brabham, que ha pasado a ser número uno tras la retirada de Lauda. Villenueve y Laffite ocuparán la segunda fila; Regazzoni y Reutemann, la tercera, y Arnox y Jabouille, la cuarta.
