Sarrió, pendiente de un crédito bancario de 2.000 millones

La empresa Sarrió, de cuyas dificultades financieras informábamos ayer, puede evitar la presentación de suspensión de pagos si el crédito hipotecario que actualmente negocia con un grupo de cinco bancos, por valor de 2.000 millones de pesetas, se le concede finalmente. Fuentes bancarias señalaron ayer a EL PAIS que cuatro de los bancos están plenamente de acuerdo en realizar esta operación financiera, que proporcionará un respiro notable a la empresa papelera y le permita ganar tiempo sufiÍciente como para recuperarse de la situación adversa por la que atraviesa. El quinto banco está analizando la situación con detalle y es posible que en las próximas horas adopte una decisión positiva, teniendo en cuenta que los otros cuatro, entre los que se encuentran algunos de los más importantes del país, han dado ya su visto bueno.

Razones de la crisis

Las actuales dificultades de Sarríó tienen su origen en el fuerte ritmo de inversiones desarrollado en los últimos años, que culminó en la construcción de una modernísima planta de fabricación de papel tissue en la localidad navarra de Allo (Estella). Directivos de la sociedad han señalado a representantes de los trabajadores que la percepción de sus salarios no peligra en estos momentos. Por otra parte, fuentes solventes señalaron a EL PAIS que una de las razones que habían provocado la difícil situación financiera de esta empresa ha sido el elevado volumen de impagados: que en algunos momentos ha llegado a representar la mitad de la facturación mensual de la sociedad, que cuenta con unos 5.000 trabajadores, la mayor parte en Navarra, sobre todo en la localidad de Leiza.Aunque la posibilidad de una suspensión de pagos existe, fuentes bancarias han asegurado que la empresa tiene patrimonio suficiente para afrontar un enderezamiento de su actual crisis financiera y se tienen esperanzas fundadas en la obtención del crédito mencionado. Hace unas semanas, sin embargo, uno de los bancos financiadores, Bankinter, ejecutó un efecto de unos setenta millones de pesetas.

El capital social de la empresa asciende actualmente a 3.853 millones de pesetas (es la empresa papelera con mayor capital, seguida por Papelera Española, con 3.090,75 millones de pesetas y por Torras Hostench, con 2.130 millones de pesetas) y unas reservas de 1,.879,75 millones de pesetas (menos que Torras Hostench, que contabiliza un total de 3.321,87 millones de pesetas y que Papelera Española, con 2.09,78 millones de pesetas). El valor contable de las acciones de la compañía era a finales del año pasado de 148,78 % y su cotización ha venido descendiendo en los últimos meses desde los niveles de 285% a finales de 1974, a 75% a finales del año pasado y a 40% de estos últimos días.

El pasivo de la sociedad se sitúa actualmente alrededor de los 11.000 millones de pesetas. Sus activos fijos hacen de esta empresa una de las más modernas del sector a escala europea y cuenta con ofertas de compra de alguna de sus instalaciones.