Manana, congreso de unificación de UGT Y USO

La fusión de la Unión Sindical Obrera (sector histórico) a la UGT aportará a esta central - que en la actualidad cuenta con 1300.000 afiliados- 215.000 militantes, según informaron en rueda de prensa los secretarios generales de ambas organizaciones.

Nicolás Redondo, secretario general de UGT, y José María Zufiaur, secretario general de USO (h), explicaron que el proceso de unificación que culminará mañana con la celebración del congreso unitario de ambas organizaciones, es exclusivamente el resultado del análisis de su realidad y que en las negociaciones ambas centrales han tenido que ceder, con lo que se ha logrado al enriquecimiento del sindicalismo de orientación socialista.Señalaron asimismo que no ha habido grandes dificultades para la culminación de este proceso de unificación o acoplamiento, dada la estructura similar de ambas organizaciones en todos sus sentidos, e insistieron en que ambas centrales - cuyas bases han sido consultadas en todo momento se fusionan en pie de igualdad.

El congreso unificador de mañana acabará con la dualidad de cargos entre la UGT y el PSOE. Todos los miembros de la ejecutiva ugetista que ostentan cargos en la ejecutiva del PSOE dimitirán de estos últimos, para facilitar el carácter autónomo del sindicalismo socialista resultante de la fusión de ambas centrales. Coincidiendo con la rueda de prensa de ambos dirigentes, un grupo de militantes de la USO renovada se concentró en el Club Internacional de Prensa, donde tenía lugar la reunión informativa, para expresar su disconformidad con «el atentado que representa para nuestra organización las maniobras políticas de UGT».

Por otra parte, continúa el pleito por las siglas de USO, y que el fiscal ha resuelto no válido el congreso del 2 de octubre - según informa Zufiaur-, en el que se escindió la central en dos fracciones, la otra de las cuales encabeza Manuel Zaguirre.

Precisamente esta otra fracción, la USO (renovada), ha editado un libro en el que, bajo el título Atentado contra USO: desafío a la autonomía sindical, se hace un análisis de las circunstancias que llevaron a la escisión de esta central el pasado 2 de octubre.

Firma el prólogo del libro el secretario general de la USO autonomista, Manuel Zaguirre, y en él hace una dura crítica de las «hienas y usureros que, tal vez sin mala fe, quisieran que este país pasara de ser una finca de Franco a una finca de su exclusivo disfrute político o sindical». El libro señala también el «papel activo jugado por el PSOE y la UGT» en todo el proceso que recoge sus páginas.