Maertens también ganó la etapa más larga

Maertens también venció en la etapa más larga de la Vuelta, 204 kilómetros entre Teruel y Alcalá de Chivert. Ganó en un sprint apoyado por Pollentier, a todos los presuntos favoritos de esta Vuelta, que iban escapados. La séptima etapa, con lluvia y frío, sexta victoria de Maertens, rompió la carrera, ya que el pelotón llegó muy fraccionado y las diferencias alcanzaron los veinte minutos. Luis Ocaña llegó a más de trece minutos del belga, y se encuentra ahora más cerca del farolillo rojo que del líder.

Los intentos de escapada llegaron pronto. A once kilómetros de la salida saltaron Fontanelli y Tinchella. En el veintinueve, el primero tenía una ventaja de 46 segundos y en el 36 quedó, absorbido por el pelotón. En el 101 se escaparon dieciséis hombres, que luego fueron veinte, los mejores, y en los últimos kilómetros Maertens tuvo que luchar a fondo para neutralizar los fortísimos tirones de Perurena, al que un inoportuno pinchazo quizá le impidió vencer en solitario cuando marchaba escapado.El alto del Escandón, de tercera categoría, fue cruzado por Fontanelli, Tinchella y Loos, en este orden; era el kilómetro doce y en el 39 estaba la meta volante de Mora de Rubielos, en la que venció Schepmans, seguido de Tinchella y Nazábal. En el 77, en la sierra Ferriz, de segunda categoría, los esprañoles plantaron cara y pasaron Oliva, Torres y Loos en sus primeros lugares. Treinta kilómetros más tarde se encontraba el puerto del Remolcador, de primera categoría, y en el que venció Viejo por delante de Torres y Oliva. En el kilómetro 124, Viejo, Maertens y Lasa lucharon por los cuatro segundos de bonificación de la meta volante de Figueroles; la línea fue cruzada por el orden expuesto. En el 170 se encontraba la última dificultad de la etapa, la sierra de Lesantes, de tercera categoría; Guevara y Verschuere lograron distanciarse de los escapados y pasar el alto por ese orden; Viejo fue tercero.

La octava etapa, que se disputará hoy entre Alcalá de Chivert y Tortosa, entrará por vez primera en la Vuelta en tierras catalanas, concretamente por Uldecona, donde se disputará una meta volante, para seguir por Santa Bárbara y terminar en el velódromo de Tortosa.