Comunicado de dos sacerdotes sobre la manifestación de San Cristóbal de Los Angeles

Dos sacerdotes de San Cristóbal de los Angeles, participantes en la manifestación que se produjo el pasado sábado en este barrio madrileño como consecuencia de la muerte por atropello sufrido por una mujer, han hecho público un comunicado a los medios de difusión en el que exponen su postura ante estos sucesos y justifican su presencia en la manifestación.Francisco de la Flor, párroco de la iglesia de Nuestra Señora de los Desamparados y Manuel María Sánchez Diezma, coadjutor de la misma parroquia, opinan que las notas aparecidas en torno al tema no aclaran convenientemente la situación producida en San Cristóbal de los Angeles.

«Estimamos en primer lugar que la necesidad de dicho paso elevado es urgente por la cantidad de muertos producidos en dicho paso de la carretera de Andalucía, con lo que se justifica el malestar del vecindario. Ante la tensión grave existente, que podría culminar en tragedia, no quisimos encerramos en nuestras casas, sino ayudar a pacificar el ambiente. Después de identificamos como sacerdotes ante la fuerza pública no sólo no fuimos escuchados sino que fuimos insultados, maltratados y apartados sin poder llevar a cabo ninguna acción pacificadora ante dicha fuerza pública. Nos preocupan los métodos empleados por la policía, al menos en esta ocasión que manifiesta una falta de serenidad y dominio de sí mismos, tan necesarios en estos -momentos que requieren de todos un fuerte sentido de responsabilidad para promover la convivencia solidaria, sobre todo en barriadas que sufren infinidad de problemas».

La manifestación surgida espontáneamente para pedir un paso elevado, no es la primera solicitud pública que los vecinos hacen en este sentido ya que las numerosas víctimas producidas en accidentes han determinado a los vecinos en otras ocasiones a recabar la atención oficial sobre este problema.