_
_
_
_
LaLiga Santander jornada 24
Barcelona
Barcelona
Raphinha 15'
1 0
Finalizado
Valencia
Valencia

El Barça no juega, defiende

El equipo de Xavi apela a su zaga para validar un gol de Raphinha después de que Ferran fallara un penalti y Araujo fuera expulsado ante un nublado Valencia

Raphinha marca de cabeza el único gol del Barcelona ante el Valencia.
Raphinha marca de cabeza el único gol del Barcelona ante el Valencia.Joan Monfort (AP)
Ramon Besa

El Barça ya defiende igual el liderato de la Liga que la semifinal de Copa. El partido del Bernabéu tuvo su continuidad en el Camp Nou. La zaga sostuvo a un equipo sin delantera, falto del juego y adicto al 1-0. El marcador ya se ha repetido diez veces y son 21 sobre 36 los partidos en que los azulgrana dejan su marco a cero después del cruce con un Valencia cegado por el abismo que supondría el descenso a Segunda. El miedo y la impotencia definieron al plantel del Pipo Baraja. No supo jugar contra 10 después del rosario de calamidades en la que se enredó el Barcelona. Araujo fue expulsado, Ferran falló un penalti y el equipo encontró una coartada para no hablar del cómo y salvar el 1-0.

BCNBarcelona
Barcelona
1
Ter Stegen, Ronald Araújo, Alex Balde, A. Christensen, Koundé, Busquets, Sergi Roberto (Eric Garcia, min. 81), Frenkie De Jong (Kessié Franck, min. 45), Ansu Fati (Marcos Alonso, min. 61), Raphinha (Angel Galiot, min. 87) y Ferrán Torres
VAL Valencia
0
Valencia
Mamardashvili, Foulquier, Cenk Özkacar, Eray Cömert (Mouctar Diakhaby, min. 54), Vazquez Alcalde, Thierry Correia (Samu Castillejo, min. 61), Andre Almeida (Yunus Musah, min. 78), Samuel Lino (Justin Kluivert, min. 78), Hugo Guillamón, Moriba Kourouma (Francisco Martinez, min. 61) y Hugo Duro
Goles 1-0 min. 15: Raphinha.
Árbitro Javier Alberola Rojas
Tarjetas rojas Ronald Araújo (min. 58)

La defensa salvó un partido que no tiene defensa desde el punto de vista futbolístico, muy mal jugado por dos equipos que viven un ataque de nervios por situaciones opuestas, entregados a cualquier jugada para salvar su actuación: el Valencia pidió un penalti de Kessié a Fran Pérez en la única jugada de mérito del segundo tiempo y el Barcelona vivió del gol de Raphina en la única acción limpia de un partido enrevesado, imposible de analizar y que solo se justifica por la clasificación después de la derrota en Almería.

El foco del partido estaba puesto de inicio en los delanteros, tres futbolistas ya muy discutidos por separado y que se juntaron en un mismo partido por las lesiones y las sanciones de cuatro titulares, columna vertebral del equipo como son Lewandowski, Pedri, Gavi e incluso Dembélé. La pelota, sin embargo, tardó en llegar a Ansu Fati, a Raphinha y a Ferran Torres, tan bien defendidos por el Valencia como desasistidos por los tres medios azulgrana después de que Xavi diera descanso a un cuarto volante como Kessié. El encuentro se inclinó hacia el costado de Balde, recortado por Foulquier y Thierry Correia, y el juego azulgrana descansaba en los saques largos con el pie de Ter Stegen.

Hasta que se activó Raphinha. El brasileño perseveraba en el uno contra uno ante el novel Vázquez, combinaba a veces con Ferran y estuvo hábil cuando se anticipó a Mamardashvili en un balón dulcemente templado a la salida de un saque de banda por Busquets. <CW-4>Un gol delicado para atemperar una contienda atropellada, sin continuidad, mejor dispuesta para el Valencia. No había línea de pase y el desorden se imponía sorprendentemente porque se aguardaba un diálogo entre la ofensiva azulgrana y el sistema de contención armado por Baraja. El 1-0 tranquilizó y asentó durante diez minutos al disperso equipo de Xavi.

El encuentro siguió abierto por la falta de remate y por la ausencia de ritmo del Barça. Los azulgrana se descentraron de mala manera y desde la imprecisión y la falta de autoridad propiciaron la réplica del Valencia. No había manera de que acertara Ansu y hasta se equivocaba Christensen, Los delanteros, desatinados ante Mamardashvili, pasaron a jugar en el área de Ter Stegen. Ansu perdió por dos veces la pelota y Ferran arriesgó tanto en una cesión a Ter Stegen que si no acabó en gol fue porque a Lino se le fue el tiro por encima del larguero de la portería de Les Corts. Al descanso se llegó con la pelota en el campo del Barcelona después de una ocasión fallida de Ilaix.

El líder es un central

No tiene el Barça a un jugador que cosa el juego ni tenga jerarquía sobre el partido en ausencia de Pedri. El único líder es Araujo. El uruguayo intentó despertar al equipo con un despeje a la banda como alternativa al fútbol taquicárdico de sus compañeros ante la intranquilidad del Camp Nou. La sustitución de Frenkie de Jong, muy cargado de minutos, no ayudó precisamente a calmar los ánimos de la hinchada del Barcelona. La pelota quema tanto a los pies de los azulgrana que ya han dejado de reñir por la posesión y se entregan a un intercambio de golpes sin control y a discusiones para ver quién tira un penalti como el que pitó el árbitro porque el brazo de Guillamón rechazó un disparo de Koundé.

Ferran y Ansu parlamentaron un rato para decidir quién ejecutaba la pena máxima hasta que el valenciano tomó el balón, chutó al suelo y su tiro salió junto al poste derecho de Mamardashvili. La cadena de errores se sucedieron en el Barça después del fallo en el penalti de Ferran. Los azulgrana pasaron del posible 2-0 a defender un 1-0 con diez por la expulsión de Araujo. El uruguayo placó a Guillamón a campo abierto después de un error de Koundé. El carrusel de desaciertos provocó el sacrificio de Ansu. Xavi fue inclemente con el delantero después de que el palo rechazara un disparo suyo antes de ser sustituido por Marcos Alonso.

El Barça apelaba a un central de emergencia mientras el Valencia no paraba de sumar delanteros para tocar a la carga contra Ter Stegen. Los azulgrana, sin embargo, contuvieron al rival mejor con 10 que con 11. Apretaban mejor en la medular y no concedían ocasiones a pesar de que boqueaban por el flanco de Balde y Sergi Roberto. Ya nadie hablaba de los atacantes a la hora de partido sino de sus cuatro defensas: Koundé se quejaba, Christensen aguantaba y Eric García ayudaba en la emergencia con Marcos Alonso.

Ter Stegen ni siquiera fue exigido después que el Valencia solo forzara una oportunidad en una caída de Fran Pérez ante Kessié. El árbitro no vio sanción y el Camp Nou resopló aliviado al tiempo que se abrazaba a su equipo, no por su estilo ni virtuosismo, sino por sobrevivir como líder en la Liga, sin medios ni atacantes —solo ocho goles en contra— y tener ventaja también en las semifinales de la Copa.

Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Ramon Besa
Redactor jefe de deportes en Barcelona. Licenciado en periodismo, doctor honoris causa por la Universitat de Vic y profesor de Blanquerna. Colaborador de la Cadena Ser y de Catalunya Ràdio. Anteriormente trabajó en El 9 Nou y el diari Avui. Medalla de bronce al mérito deportivo junto con José Sámano en 2013. Premio Vázquez Montalbán.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_