Ancelotti: “El madridismo cree más en lo que podemos hacer el miércoles”
Ancelotti celebra el buen encuentro de su equipo, que le hace tener más confianza en una remontada contra el PSG que ya ha comenzado a calentar la grada
En plena crecida emocional por la remontada, con cuatro goles y dos tantos anulados contra la Real, el Santiago Bernabéu comenzó a imaginar otra remontada contra el Paris Saint-Germain el miércoles en la vuelta de octavos de la Champions (1-0 en la ida). Al terminar el partido, los jugadores extendieron un poco más sus saludos a la grada, y Carlo Ancelotti, después de abrazar uno a uno a sus futbolistas camino de la ducha, cruzó también el campo hasta plantarse enfrente de la grada de animación para aplaudirles. Después volvió a la banda a abrazarse con su cuerpo técnico, una explosión de desahogo en la que alguno casi se trastabilla.
De fondo de ese último festejo, la grada miraba ya al miércoles: “¡Sí se puede! ¡Sí se puede!”, gritaba. Y también, un clásico de Chamartín: “¡Reyes de Europa, somos los reyes de Europa!”. Cuando desparecieron todos los futbolistas, y hasta el último utilero, la grada de animación seguía ocupando sus posiciones. Querían un bis. “¡Los jugadores, que salgan los jugadores!”, corearon. Y los jugadores dejaron a medias lo que habían empezado a hacer en el vestuario, y salieron. Marcelo, Courtois, Vinicius y Alaba, en chanclas. Hazard con el chándal completo con el que había ocupado el banquillo. Alargaron un rato en el que volvió a recitarse el clásico de los reyes de Europa y se despidieron hasta el miércoles.
La ceremonia solo se la perdió Rodrygo: “Estaba dando entrevistas, y fui el único que no salí. Después le pregunté a Vini: ‘¿Qué estabais haciendo ahí?’, y ya me dijo que estaban saludando a la afición”, contó. Carlo Ancelotti desveló cómo se había fraguado ese regreso al césped: “El agradecimiento a la afición ha salido de los jugadores. Creo que ha sido bonito. Será indispensable la ayuda de la afición el miércoles”.
En eso coincidieron todos los futbolistas que se detuvieron ante un micrófono, como Rodrygo: “Es nuestra casa, jugamos con nuestra afición. Si nuestra afición nos ayuda, ahí somos mucho más fuertes”.
Aunque no fían todo el optimismo al apartado ambiental. Ancelotti encontró señales para la esperanza: “Creo que hemos jugado muy bien desde el principio. El plan era esto, presionar arriba, intentar dificultar la salida de la Real. Jugando así tenemos más probabilidad de hacerlo bien en el partido del miércoles”, explicó. “Todo el madridismo, después de este partido, cree más en lo que podemos hacer el miércoles”.
Ese día resultará fundamental cómo resuelve el técnico el problema generado por la ausencia de Casemiro, por acumulación de tarjetas, y la posible baja de Kroos, lesionado. Contra la Real no pudo emplear a Valverde, que tenía gripe, y echó mano de Camavinga, que marcó un golazo e hizo además unas cuantas cosas más bien, según el técnico: “Es un jugador que tiene calidad. No importa si lo quito al final de un tiempo. Él sabe perfectamente, porque he hablado con él esta semana, la importancia que tiene en esta plantilla. Su fútbol es de calidad y energía”. Sin embargo, también explicó que “no hay un jugador que pueda sustituir a Casemiro. Se puede meter en la plaza de Casemiro otro jugador, pero con características distintas”. Pero no se mostró preocupado para el duelo contra el PSG: “A pesar de esto vamos a competir sean los que sean los tres medios”.
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