Bale, del mercado a titular
Tras rondar una salida a China, Bale juega de inicio, asiste y convence a Zidane
Tan largo el verano, tan solo noventa minutos para dejarlo atrás. “Tantas especulaciones y opiniones… Nosotros vivimos al margen. Solo nos preocupaba hacer una buena preparación y llegar lo mejor posible al primer partido”, explicó Sergio Ramos mientras festejaba la victoria en el inicio de Liga. Por primera vez en los últimos doce años el Madrid suma más puntos que el Barcelona en la jornada inaugural. El dato puede ser baladí, pero ayuda a germinar la ilusión en un entorno que parecía deprimido. Y aún no había rodado la pelota en el nuevo curso.
El balón se movió y tras él corrió Gareth Bale, una alerta de que todo lo que se había visto en las últimas semanas no era fuego real. Tras jugar apenas una sexta parte de los minutos posibles (101 sobre 630) en los duelos de preparación y después de que le situasen en variados destinos, la locomotora de Gales arrancó en Vigo. “Igual la lesión de Hazard le dio opciones al Madrid de volver a un sistema en el que se siente cómodo”, reflexionó el técnico local, Fran Escribá. Zidane llamó a sus clásicos, cocinó una alineación con siete de los once futbolistas en los que confió para iniciar la final de la Liga de Campeones hace algo más de dos años. Una de las cuatro novedades era Gareth Bale, que ya puede guardar el pasaporte porque seguirá en el Real Madrid. Zidane lo confirmó. “Es aprovechable, claro. Antes del partido hablamos dos o tres veces con él para decirle que se queda”.
Bale se fajó como nunca. Fabricó el primer gol en una acción en la que abandonó la banda diestra para caer a la zurda y sacar un centro que dejó a Benzema ante el gol. “Es un atleta”, valoraban en un corrillo varios futbolistas locales antes de dejar el estadio. Pero Zidane destacaba también alguna faceta que tenía que ver con el compromiso. “En este campo van a ganar pocos equipos y era un partido de esfuerzo sobre todo defensivo. Bale y Vinicius lo hicieron por las bandas y al final sacamos a Isco y Lucas para que lo completasen. La clave del triunfo fue defensiva porque con el balón ya sabemos lo que podemos hacer”, explicó el técnico madridista.
El despliegue agranda la figura de Bale, desmiente a los impresionables y confirma que el fútbol se escribe día a día. En junio el galés no contaba, hace un mes en Houston, durante la gira americana, Zidane explicó que la situación del jugador no había cambiado. Con los puntos en juego abrazó el pragmatismo y dejó algún recado a los críticos. “La pretemporada fue complicada a nivel de resultados, pero muy buena en cuanto a trabajo”, aclaró antes de matizar que el buen arranque de campeonato es el fruto del esfuerzo de las últimas semanas. “La Liga empieza en la primera jornada y no en la pretemporada”, resolvió Thibaut Courtois.
La cara para el Real Madrid fue Bale; la cruz Luka Modric, que se marchó expulsado tras una acción en la que entró la nueva normativa que castiga con tarjeta roja los golpes a los rivales en el tendón de Aquiles. La acción marca territorio arbitral en la primera jornada porque el jugador croata no pareció golpear con aviesas intenciones a Denis Suárez. Le pisó el calcáneo y el responsable del videoarbitraje, De Burgos Bengoetxea, advirtió a su compañero Estrada Fernández, que acudió al monitor y aplicó las directrices que recibieron los árbitros en el cónclave que mantuvieron hace tres semanas en el pirineo oscense. El Madrid se quedó en inferioridad numérica, pero no solo no perdió el dictado del partido sino que lo sentenció de inmediato con el segundo gol. Así que la situación se evaluó con sordina. “Nos quedamos con uno menos y seguro que Luka no tenía intención de golpear al rival, pero llega tarde y es una jugada fea. El árbitro tenía dudas, lo vio y el VAR está para ayudar. Todo lo que sea proteger al fútbol y a los futbolistas es bueno”, zanjó Sergio Ramos.
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