El último canterano que llega al Camp Nou: Aleñá, la venganza de la Masia

En la Ciudad Deportiva del Barcelona siempre hay una misma respuesta cuando se cuestiona por la actual situación de la cantera. “Ahora estamos bien, la sanción de la FIFA nos había hecho mucho daño”, resuelven. El máximo organismo del fútbol internacional sancionó al Barça con un año sin poder fichar, durante el 2015, por la incorporación irregular de menores, y el fútbol base azulgrana lo sufrió. En los tres años que lleva Luis Enrique como entrenador del Barcelona se han estrenado en el primer equipo 16 canteranos, sin embargo ninguno ha estado ni cerca de aferrarse al Camp Nou. Hay una excepción: Carles Aleñá (Mataró, 19 años), que ayer jugó su tercer partido en el cuadro del asturiano, el primero frente a su hinchada.

Más información

Un juvenil rescata al Barcelona

El Barcelona revienta al Sevilla

“Este es el campo al que había venido tantas veces de pequeño, en el que había celebrado tantas cosas como aficionado y ahora me ha tocado jugar. Es otro sueño que se me ha hecho realidad”, contó Aleñá, que llegó al Barcelona con seis años. En la búsqueda de talento por Cataluña, el Barça y el Espanyol andan siempre a los codazos. Y, cuando apareció Aleñá, el cuadro azulgrana se adelantó y lo fichó para su equipo benjamín, a pesar de que el chico de Mataró era un año más pequeño que el resto de sus compañeros (en ese entonces, el club no tenía la categoría de prebenjamín). La idea del Barça era que Aleñá repitiera temporada con los más pequeños, pero su proyección lo hizo escalar categoría tras categoría, siempre un año adelantado.

“Estar en el Barça B en el último año de juvenil para mí es un orgullo. Pero soy muy joven y esto es muy largo. Queda mucho y debo seguir trabajando. Siempre pienso en el próximo entrenamiento para seguir mejorando. Sé que a base de trabajo llegarán las cosas”, convino Aleñá, a principios de esta temporada, cuando Gerard López, técnico del filial, lo llamó para su equipo. “No se esconde, se ofrece, es el líder. Está siempre bien predispuesto a aprender, a reconocer sus errores y entre todos tenemos que intentar cuidarlo”, asegura el técnico del filial. Sin embargo, Gerard López, pide paciencia: “No hay que vender a Aleñá como un crack cuando todavía no lo es”.

Luis Enrique lo dosifica. Este verano se lo llevó a la pretemporada y lo hizo debutar con el primer equipo en la Copa del Rey ante el Hércules. Aleñá respondió a la oportunidad del asturiano con un golazo. Y el domingo pasado se estrenó en la Liga ante el Granada. Ayer fue el turno de jugar ante su afición y con Leo Messi de compañero. “Jugar con el mejor de la historia es una pasada”, asegura con soltura. “Estamos muy satisfechos con él, tiene muchas condiciones. Es un chico que tiene muchas condiciones y estamos detectando a gente que puede llegar al primer equipo, pero no es fácil”, interviene Robert Fernández, director deportivo del Barça.

El contrato de Aleñá expira en junio de 2018 y en el Barça ya están moviendo los hilos para atar al canterano hasta 2021. “Será un jugador interesante, pero todavía tiene mucho que aprender. Está en el mejor sitio”, concluye Luis Enrique.

Asoma un nuevo talento en el Camp Nou, la venganza de la Masia, que quiere dejar en el olvido a la sanción de la FIFA.