_
_
_
_

Luka Modric vuelve a coger el mando

El Real Madrid recupera en un momento clave a su mejor organizador tras haber sufrido en su ausencia problemas en la salida del balón y en la creación ofensiva

Eleonora Giovio
Modric, durante el entrenamiento del Madrid en Valdebebas
Modric, durante el entrenamiento del Madrid en ValdebebasCHEMA MOYA (efe)

La enfermería de Valdebebas, en overbooking hasta hace un par de semanas, se ha vaciado justo a tiempo para la vuelta de la Champions y para una salida, la de Pamplona, de la que Zinedine Zidane dice no fiarse ni un pelo. Y no solo porque los suyos llevan doce días sin competir. “No me gusta nada jugar contra el último y menos en un campo en el que siempre nos han complicado las cosas. Como jugador nunca estuve cómodo allí”, confesó ayer.

Los blancos visitan al colista cuatro días antes de medirse al Nápoles en la ida de los octavos de Champions. Osasuna ha sumado tan solo seis puntos esta temporada, pero el técnico francés dice que pase lo que pase, es un equipo que siempre juega bien. Para el partido en El Sadar (20.45, M+ Partidazo) recupera a todos los lesionados salvo Bale. Carvajal y Marcelo estaban ayer listos para entrar en la lista de convocados, así como James, Pepe y Modric.

El regreso del croata arregla los problemas que ha tenido el equipo en la salida de balón en los dos últimos partidos. Queda por ver si jugará de inicio —Kroos está sancionado— o si Zidane lo empleará en la segunda parte para que vaya cogiendo ritmo de partido ante la cita del miércoles. Modric se lesionó el 21 de enero contra el Málaga. Pidió el cambio por unas molestias musculares. La sobrecarga en el aductor le hizo perderse la vuelta de los cuartos de Copa en Balaídos y el partido contra la Real. Sin el croata, que parece llevar un mando a distancia en las botas, el Madrid perdió a su brújula y tuvo muchos problemas en la salida de balón.

Más información
Los doce días sin partido del Real Madrid: menos ritmo y mismas cargas
Modric: “Estaba seguro de que acabaría triunfando”
Zidane: “Si el presidente dice que hay obras en el Bernabéu, hay obras”

En Vigo, Zidane colocó a Casemiro de central (Varane y Pepe estaban lesionados) y formó una medular de cuatro con Danilo, Kovacic, Kroos y Asensio. Berizzo puso a Wass encima de Kroos y el Madrid perdió capacidad de organización. Contra la Real también sufrió en la salida de balón, sobre todo en la primera parte. Lo corrigió tirando de una de sus mejores armas, la contra, y así marcó los tres goles.

¿En base a qué elige como se juega?, le preguntaron ayer a Zidane. “Cuando tenemos el balón tenemos que jugar al fútbol. Cuando no lo tenemos, intentamos presionar para recuperarlo lo más rápido posible. Depende también a veces de los jugadores que tienes. Es bueno no jugar siempre de la misma manera para sorprender al rival. Por lo demás, a mí me gusta jugar al fútbol”, contestó.

No nombró a Modric, el que mejor juega al fútbol de la plantilla, pero el croata es el organizador del juego del equipo. No es el que lidera el ranking de porcentaje de acierto en los pases (tiene un 89% frente al 90% de Ramos, el 91% de Kovacic y el 92% de Kroos), ni el de las recuperaciones (66 por las 73 de Casemiro, las 82 de Kroos y las 86 de Varane). Simplemente es el que marca el ritmo del partido, el que manda, organiza y distribuye.

El más buscado

Es al que más buscan (el mayor número de balones los recibe de Kroos) y el que mejor sabe leer el juego. El que da un paso al frente cuando hay que darlo, el que busca la profundidad con Lucas y Carvajal, el que decide si jugar en corto o en largo. Y el que echa la bronca a sus compañeros cuando no repliegan. Su peso en el vestuario y su autoridad en el campo no se discute. Tampoco tiene miedo a hablar, ni siquiera cuando resulta políticamente incorrecto, como en el Mundialito cuando le preguntaron por el videoarbitraje y dijo: “no me gusta, no es fútbol”.

A Modric, que renovó hasta 2020, le falta por ganar la Liga con la camiseta del Madrid. El día de la ampliación de contrato le preguntaron si le daban más miedo las lesiones o el paso de los años: “Ninguna de las dos. Volví más fuerte de cada una de ellas. Me siento bien y me cuido mucho. Tengo 31 años, puede que algunos piensen que estoy un poco viejo, pero no. Con 31 años estoy haciendo el mejor fútbol de mi vida, con más años estaré mejor o al mismo nivel”.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Eleonora Giovio
Es redactora de sociedad especializada en abusos e igualdad. En su paso por la sección de deportes ha cubierto, entre otras cosas, dos Juegos Olímpicos. Ha desarrollado toda su carrera en EL PAÍS; ha sido colaboradora de Onda Cero y TVE. Licenciada en Ciencias Internacionales y Diplomáticas por la Universidad de Bolonia y Máster de EL PAÍS.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_