Hamilton pone distancia con Rosberg

Lewis Hamilton no perdona. En cambio, los problemas se le acumulan a Nico Rosberg en su intento ya desesperado por mantenerse en la lucha por el título mundial. Mientras el británico confirma en cada carrera su óptimo momento, al alemán se le complica todo. En el Gran Premio de Alemania, al lado de su domicilio, Rosberg realizó una pésima salida que le condicionó toda la carrera. Mientras Hamilton se impuso sin problemas, conduciendo con una solvencia insuperable, Rosberg acabó cuarto, superado por los dos Red Bull, con los que nunca estuvo en condiciones de luchar. El podio, pues, lo coparon Hamilton, Daniel Ricciardo y Max Verstappen, cada vez más habituado a pisar el cajón. Ahora, la diferencia entre el británico y el alemán de Mercedes en el Mundial es de 19 puntos.

La carrera comenzó a decidirse ya en la salida, donde Rosberg sufrió una pérdida de adherencia y se vio superado, no solo por su compañero de equipo Hamilton, sino también por los dos Red Bull de Verstappen –que se comió a su compañero- y Ricciardo. Por detrás, Fernando Alonso comenzó su remontada para situarse en zona de puntos, justo detrás de Jenson Button. También Carlos Sainz –que había perdido tres posiciones por perjudicar a Massa en la clasificación- adelantaba, pero lo perdía todo en un pésimo pit stop al que le condenó su equipo en la novena vuelta. Quedó relegado al 17º lugar.

En el primer cambio de neumáticos, la estrategia de Rosberg demostró ser poco efectiva. El alemán entró de los primeros en el taller (11ª vuelta) y le colocaron de nuevo los súper blandos. En cambio, Hamilton, que entró dos vueltas más tarde, se calzó los blandos. Pero al cabo de pocas vueltas los tiempos de los dos Mercedes eran muy similares e incluso eran mejores los del británico con unas gomas más duras. En estas condiciones, la carrera se le complicó de mala manera a un Rosberg desesperado que ni siquiera podía adelantar a los dos Red Bull.

Tras el segundo cambio de neumáticos, Rosberg consiguió superar a Verstappen en una curva a la derecha en la que cogió el interior y obligó al holandés a salir de la pista para evitar tocarle. Esta maniobra fue estudiada por los comisarios y supuso una sanción de cinco segundos a Rosberg, que se quejó amargamente a su equipo por la radio: "¿Podéis decirles a los comisarios que no podía girar más hacia la derecha?”. “Tira a fondo, porque los pagarás en la próxima parada”, le respondieron. Mientras tanto, Hamilton ni siquiera perdió la cabeza de la carrera cuando realizó su segundo cambio de neumáticos y calzó los súper blandos, con los que comenzó a rodar el más rápido. Su carrera no tenía fisuras. Iba directo hacia la victoria.

Rosberg paró en el taller por tercera vez en la 44ª vuelta y pagó su sanción de cinco segundos. Y ello dio alas a Verstappen que cogió la distancia suficiente como para evitar que el alemán le atrapara y le plantara cara. El problema fundamental de Rosberg fue que el ritmo de carrera de los Red Bull era muy similar al suyo y al de Hamilton, que corría de forma muy conservadora manteniendo siempre una distancia mínima de seis segundos sobre Ricciardo. Rosberg le arañaba décimas a Verstappen, pero no las suficientes para complicarle las cosas. Y el alemán tuvo que conformarse con una cuarta posición que le permite mantenerse en segunda posición en la clasificación del Mundial, pero que le aleja cada vez más de su sueño de ganar su primer título mundial: ahora, el británico le supera con 19 puntos de diferencia.

Por detrás, Fernando Alonso estuvo luchando toda la carrera para entrar en los puntos. Llegó a ocupar la octava posición en los cambios de neumáticos, pero fue cayendo en la clasificación hasta concluir 12º. Se quedó de nuevo fuera de los puntos, al igual que un Carlos Sainz al que nada le fue de cara. El madrileño acabo 14º, justo por delante de su compañero de equipo, Daniil Kvyat. En McLaren, en cambio, Button se clasificó octavo y concedió cuatro puntos a la escudería.