Draxler llega a tiempo para Alemania
El extremo, que entró en la lista por los pelos debido a una lesión muscular, es el futbolista más desequilibrante de la selección germana
Después del desayuno en grupo, el seleccionador Joachim Löw le pidió que se acercara porque había visualizado el partido ante Eslovaquia y consideraba que necesitaban de sus quiebros y llegadas, también de su profundidad, para poder romper a una zaga que amontonaba piernas y jugadores alrededor de su área. “Me explicó que iba a ser titular y todo lo que quería que hiciera. Se trataba de explotar mi uno contra uno y que buscara hacer jugadas por las alas para romper a su organizada defensa”, reconocía Julian Draxler (Gladbeck, Alemania; 22 años) horas después, ya en la zona mixta del estadio, con su cara de niño y de no haber roto nunca un plato; “espero poderle haber complacido con mi juego”. A buen seguro que lo hizo, escogido mejor del encuentro tras una diana y una asistencia que valían el pase a los cuartos de final ante Italia.
Hay una certeza con Löw y así se lo reconocen hasta los clubes de la Bundesliga. “Es un entrenador que recupera a los jugadores, que sabe ponerlos en forma en poco tiempo y hasta les da más confianza”, dicen desde el Bayern de Múnich; “les hace una pequeña pretemporada y suele funcionar muy bien”. Así sucedió con Schweinsteiger en el pasado Mundial, que lo empezó a la pata coja y acabó siendo el mejor de la final conquistada, y así está ocurriendo con Draxler, que llegó bien justo al torneo por una lesión muscular ante el Madrid en los cuartos de final de la Champions, y ya va como un tiro. Sus compañeros de vestuario no tienen dudas. “Frente a Eslovaquia ha hecho un partido extraordinario”, le reconocía Boateng. “Un gol y una asistencia, ¿no?”, decía Kroos al tiempo que soltaba una pequeña sonrisa de elogio; “ha jugado muy bien. Al igual que con Müller, los hemos encontrado con espacios”. Weigl añadía: “En la forma que está, no cabe dudas de que es muy importante para nosotros”. Y hasta Löw se posicionó: “Ha estado valiente para encarar, ha trabajado bien y ha hecho buenos movimientos. Por eso estoy encantado con él”.
La llegada de Draxler al equipo titular de Alemania era cuestión de lógica, toda vez que en esta ocasión no ha salido bien la otra cruzada del técnico, que era recuperar la mejor versión e Götze. Ocurre que el héroe de la final del Mundial no ha funcionado de falso nueve como tampoco desbordó por el costado ante Irlanda del Norte. Por lo que el gancho de Mario Gómez resulta imprescindible en el área rival y los driblings de Draxler por la izquierda –por la derecha juega Müller- son la fuente de producción. Toda una alegría para alguien que ha visto entrecortada su carrera por las lesiones musculares, puesto que desde que debutara en 2011 ha sufrido un total de 14 que le han tenido apartado 283 días de los terrenos de juego. Pero nada de todo eso impidió que lo fichara el Wolfsburgo –este año apenas ha participado en 21 encuentros- para reemplazar a De Bruyne (Manchester City); ni que Löw le haya dado una oportunidad que le negó en 2012 –lo sacó de la lista definitiva de la Euro- y que apenas pudo disfrutar en el Mundial de Brasil con una pequeña participación ante la selección anfitriona, en el sonoro 7 a 1. El 11 de Alemania admitía su felicidad: “La lesión tras el Madrid duró semanas y semanas y parecía que nunca me iba a recuperar. Pero Löwpudo contar conmigo porque he trabajado muy duro día y noche para estar en esta Eurocopa. Ahora me toca disfrutar”.
Tiene uno contra uno y puede hacer lo que quiere con la pelota. Este chico es increíble André Schürrle, extremo de la selección alemana
Ya lo dijo Raúl González cuando compartía vestuario con él en el Schalke -“estamos ante un futbolista especial que dará mucho al Schalke y a la selección de Alemania en un futuro no demasiado lejano”- y así lo ven desde la Mannschaft. “Es un futbolista de gran calidad”, le definía Weigl. “Puede pasar, regatear y tiene tiro. Es perfecto para Alemania”, se sumaba Boateng. “Es un jugador para España, ¿eh?”, bromeaba Mario Gómez; “no, en serio, es un futbolista que sabe jugar de maravilla con los dos pies y que técnicamente es espectacular”. Y se posicionaba Schürrle, competidor natural por el puesto: “Lo está haciendo muy bien. Tiene uno contra uno y puede hacer lo que quiere con la pelota porque confía mucho en sí mismo. Este chico es increíble. Su potencial es muy grande y estoy feliz de que pueda demostrarlo con la selección”. Eslovaquia lo sufrió. Toca Italia.
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