“Casillas va a tener un papel estelar”

José Ángel Iribar (Zarautz, 71 años) y Dino Zoff (Mariano del Fiuli, 72 años) coincidieron en el terreno de juego en la final de la Copa de la UEFA de 1977, disputada a doble partido y que conquistó el Juventus frente al Athletic por el valor doble del gol conseguido en San Mamés. A partir de ese duelo surgió una amistad que aún perdura y que incluye no solo admiración mutua, sino un parecido físico que combina con su parecido futbolístico: ambos eran porteros grandes, altos, pero sobrios, que transmitían seguridad a sus equipos. Parecidos en el físico difieren en sus gustos: el italiano apuesta por Neuer como portero del Mundial e Iríbar por el español Iker Casillas.

Dino Zoff. Ante todo tú eres mi amigo y además fuiste un gran portero. De ti me llamaba la atención la buena técnica y que eras un portero que estaba siempre bien colocado. Por eso no necesitabas de grandes esfuerzos ni muchos alardes para hacer el trabajo.

José Ángel Iribar. Yo siempre he valorado en ti la sobriedad y la seguridad, que es algo que te da mucho valor psicológico entre tus compañeros, entre la afición y entre los que quieren engañarte y hacerte un gol. Por eso dejábamos a un lado los alardes y pretendíamos transmitir esas sensaciones, algo que a veces conseguíamos y otras veces, no.

D. Z. Éramos tan parecidos que en aquella época decían que éramos como hermanos, no sé, la altura, las patillas, un aspecto físico bastante parecido, ¡ja, ja, ja!

Courtois, siendo tan joven, está haciendo cosas increíbles Iribar

J. A. I. Ayer mismo me decía tu mujer, que sí, que teníamos un aire. Recuerdo que cuando salimos a jugar el partido de ida de la final de la UEFA en el Comunale, los jugadores de ambos equipos hicieron una pequeña broma preguntando quién era quién, cuál era su portero. Fue un momento de humor y de simpatía dentro de la responsabilidad y la importancia de aquella final. Pero sí, siempre se hacían bromas con esto.

D. Z. Aquella final fue tremenda. En el partido de vuelta, acabé realmente agotado, porque hubo muchísima presión y fue muy fuerte para mí. Parecía una guerra en la que el enemigo venía a oleadas continuas. Sobre todo en los minutos finales me sentí realmente agotado, no solo por las intervenciones que tenías que hacer sino por la presión psicológica. No podías distraerte un segundo porque estábais continuamente en nuestro campo. Fue realmente agotador.

J. A. I. Yo lo viví de lejos, porque me sentí un espectador de lujo en la segunda mitad, y veía que podíamos, que podíamos y se veía ese trabajo constante. No me extraña que acabases tocado. A mí me pasó lo mismo en un partido de la Copa de Ferias (la antigua Copa de la UEFA), contra el Liverpool en el que además hubo prórroga

D. Z. Muchos piensan que por ser un portero italiano estás más acostumbrado a este tipo de trabajo, por eso de que si somos más defensivos y esas cosas, pero no es cierto. Antes y ahora, para un portero, en Italia o donde sea, es la misma cosa. Los partidos no son iguales y las situaciones van cambiando.

En Italia, Buffon es un gran portero, pero detrás no hay mucho donde elegir Dino Zoff

J. A. I. Además, no se puede meter a todos en el mismo saco. No todo el mundo en Italia, en España o en Inglaterra juega igual. Yo recuerdo que el mejor Liverpool de mi época no jugaba como un equipo inglés sino más bien como se juega ahora. Lo que sí es cierto es que Italia ha trabajado muy bien la defensa, con futbolistas muy rápidos, con mucha anticipación y muy agresivos y cuando defiendes bien, el portero tiene menos trabajo.

D. Z. En eso y en todo. Por ejemplo, el debut de un portero no es lo mismo que el debut de un jugador de campo. Exige mucha personalidad, mucha fuerza de carácter, más que para un jugador de campo, porque te pueden hacer dos goles o ninguno y en realidad tiene poco ver. En realidad, es después del debut cuando se nota si eres bueno o no.

J. A. I. La verdad es que nosotros tuvimos trayectorias muy distintas. Tú debutaste en Primera ya con una edad más madura y yo era aún muy joven.

D. Z. Pero ahí está mi palmarés, ¡eh! Campeón de Liga con el Nápoles con 26 años, debutante con la Juve con 30 y luego ganador de un Mundial con 40 años y siendo el capitán de la selección. Es algo muy importante, algo inolvidable. He ganado muchas cosas, pero ese fue mi momento de máxima felicidad.

J. A. I. Ahí sí que tengo eso que se llama, no se si acertadamente, envidia sana. Ya ves, trayectorias distintas. Pero lo que está claro es que si antes empiezas, antes terminas, eso lo explica cualquier símil mecánico.

D. Z. Vamos, que si hay muchos partidos como el de Bilbao, no llego...

J. A. I. Es que la gente no se da cuenta de lo que un portero se desgasta en muchos partidos. Y aunque el trabajo es el mismo que el de antes, ahora es cierto que se necesitan más cualidades.

D. Z. Antes se decía que un portero alto era necesariamente un portero lento y ahora no se piensa eso. Ahora los porteros altos son más coordinados, más flexibles. Y luego está la necesidad de jugar con los pies por las nuevas normas y por la forma de jugar al fútbol. Yo tenía una buena derecha y me arreglaba bien en esa faceta.

J. A. I. Pero lo decisivo es parar, evitar el gol.

D. Z. De eso no hay duda. Si además juegas bien con el pie, pues mejor que mejor.

J. A. I. En España la figura del portero ha evolucionado positivamente, a diferencia por ejemplo de Inglaterra, donde hace años que no surgen porteros de garantías y parece que existe un problema endémico. No se si ocurre igual en Italia.

D. Z. En Italia existe un gran portero que es Buffon, pero detrás de él no hay mucho donde elegir. Quizás sea un problema de la globalización. En nuestra época era impensable que un portero brasileño jugase en la Liga italiana y ahora hay dos o tres.

J. A. I. Sin embargo, desde hace años hay buenos porteros españoles jugando en Ligas europeas. Y también se puede comprobar en la selección española porque hay mucho donde elegir. En eso creo que España puede presumir de cara a este Mundial

D. Z. Pero ahora mismo el portero alemán Neuer está por delante de todos en Europa y en el mundo. Yo creo que el portero del Bayern Múnich es el más fuerte.

J. A. I. Mira, eso no lo tengo tan claro. Neuer es un gran portero, con mucha envergadura y está realizando un magnífico trabajo. Pero yo creo que, en este Mundial, Iker Casillas va a tener un papel estelar, a pesar de la situación tan extraña que está viviendo esta temporada. Y luego está Courtois, que siendo tan joven está haciendo unas campañas espectaculares. Un portero muy alto pero con unas buenas piernas. Y para que un portero sea sobrio, rápido y resolutivo tiene que tener buenas piernas. Esa es la clave.